En 2 Samuel 8 oímos hablar de guerras, y los filisteos y los moabitas sometieron. Leemos sobre Hadadezer, rey de Zobab, herido, y los sirios que lo socorrerían también lo sofocaron. Al mismo tiempo, algunos de los gentiles vienen a bendecir al rey con regalos, y todas esas rarezas que corresponden al carácter del reino; En resumen, el poder, la gloria y la bendición llenan la escena. Además, los edomitas están sujetos al trono. Por último, el orden administrativo y el gobierno de David se presentan ante nosotros a su debido tiempo, así como su propio lugar como supremo. “Y David reinó sobre todo Israel; y David ejecutó juicio y justicia a todo su pueblo. Y Joab, hijo de Zeruiah, estaba sobre el ejército; y Josafat, hijo de Ahilud, fue registrador”. Los sacerdotes, los escribas y los otros oficiales son llevados ante nosotros, cada uno en su lugar.