¡Qué gran obra has cumplido! (#231)

 
¡Bendito Señor!, ¡qué gran obra has cumplido!;
¡Cuán vasto fue el precio de tal redención! :
¡Tú mismo, de Dios Padre el Hijo eterno,
Y Autor y Señor de la gran crëación!
¡Cuán grande!, ¡cuán tierno es su amor!; de la gloria
El Padre Te envió hasta el mundo a morir;
Bajaste, Señor, pues quisiste a tu iglesia,
La cual adquiriste con tan cruel sufrir.
Descansan en Ti nuestras almas limpiadas
Por fe, ya en tu sangre: ¡precioso el raudal!;
Y paz dulce fluye cual aguas calmadas,
Tu misericordia cual gran manantial.
Mas gozo nos ha de llenar — ¡oh qué alegres! —
Cuando, al contemplar en la gloria tu faz,
Gocemos pues lo que hoy por fe nos impartes,
Do gloria a tu gracia culmina, a solaz.
No visto aún, Te amamos; sí, amado es tu nombre,
Mas cuando vëamoste en gran majestad,
De pronto hemos de prorrumpir a voz fuerte:
“Ni äun nos contaron de Ti la mitad.”
Que en todo superas la gloria excelente
Que ya nos fue dicho de Ti, Salvador;
Benditos son los que conocen tu nombre,
Fundados, por fe, en tu Palabra de amor.
Traducción ©1965 Messages of God's Love Multilingual. Todos derechos reservados. Usado con permiso.