Al Músico principal: sobre Seminith: Salmo de David. Salva, oh Jehová, porque se acabaron los misericordiosos: Porque se han acabado los fieles de entre los hijos de los hombres.
Mentira habla cada uno con su prójimo; Con labios lisonjeros, con corazón doble hablan.
Destruirá Jehová todos los labios lisonjeros, La lengua que habla grandezas,
Que dijeron: Por nuestra lengua prevaleceremos; Nuestros labios están con nosotros: ¿quién nos es señor?
Por la opresión de los pobres, por el gemido de los menesterosos, Ahora me levantaré, dice Jehová: Pondrélos en salvo del que contra ellos se engríe.
Las palabras de Jehová, palabras limpias; Plata refinada en horno de tierra, Purificada siete veces.
Tú, Jehová, los guardarás; Guárdalos para siempre de aquesta generación.
Cercando andan los malos, Mientras son exaltados los más viles de los hijos de los hombres.