By:
Ralph Erisman, L. Douglas Nicolet, R. Ruga y T. Roach
Duration:
4min
Este capítulo nos presenta tres ciudades donde el evangelio fue predicado después. En Tesalónica hubo mucha hostilidad. En Berea hubo mucha bendición debido al sometimiento a las Escrituras. En Atenas hubo idolatría, indiferencia y burla.
Desde Filipos, Pablo y Silas viajaron unos 160 kilómetros antes de llegar a Tesalónica (actual Salónica), un centro de comercio situado en las rutas comerciales. Como era su costumbre, Pablo entró en la sinagoga de los Judíos y comenzó a leer las Escrituras. Nos alegra ver que algunos de ellos creyeron y se juntaron con Pablo y Silas. Sin embargo, los incrédulos suscitaron oposición, por lo que los hermanos los enviaron inmediatamente de noche a Berea. Aquí, los Judíos escudriñaban cada día las Escrituras para ver si las cosas que decían los apóstoles eran así. ¿No fue eso algo noble? Siempre debemos probar todo lo que oímos por medio de la Palabra de Dios. Después de ser expulsado de Berea, Pablo fue llevado a Atenas. En esta ciudad, había mucha erudición y el tiempo libre se utilizaba diciendo u oyendo algo nuevo. Pero con toda su erudición, Pablo notó que la ciudad estaba totalmente entregada a la idolatría. Cuán cierto es que el hombre “no conoció a Dios mediante la sabiduría” (1 Corintios 1:2121For after that in the wisdom of God the world by wisdom knew not God, it pleased God by the foolishness of preaching to save them that believe. (1 Corinthians 1:21)). Utilizando un altar con la inscripción “AL DIOS NO CONOCIDO” como texto, Pablo predicó a los atenienses acerca del Dios que hizo el mundo y que no habita en templos hechos por manos humanas. Tal Dios nos dio la vida y el aliento, así como todas las cosas, deseando que Le busquemos. Si los hombres no se arrepentían y buscaban a Dios, sino que permanecían en sus pecados, ellos podían estar seguros de que llegaría el día en que serían juzgados por aquel Varón que Dios había levantado de entre los muertos. Que ninguno de nosotros esté jamás entre los que se burlaban cuando ellos oyeron acerca de la resurrección de los muertos, porque “Dios no puede ser burlado” (Gálatas 6:77Be not deceived; God is not mocked: for whatsoever a man soweth, that shall he also reap. (Galatians 6:7)).
1. Cuando Pablo abrió las Escrituras, demostró que Cristo (el Mesías del Antiguo Testamento) tenía que padecer y luego resucitar de entre los muertos, y que aquel de quien él predicaba se llamaba, de hecho, __________. Hechos 17:___
2. Los de Berea eran más nobles que los de Tesalónica porque escudriñaban cada día __________ para comprobar si la predicación era realmente verdadera. Hechos 17:___
3. ¿Qué ciudad se había entregado por completo a la idolatría? __________ Hechos 17:___
4. ¿Por qué Dios no habita en templos hechos con manos? Porque ________________________ Hechos 17:___
5. ¿Qué certeza tenemos de que este mundo será juzgado con justicia? _____________________ Hechos 17:___