Gracia y bendición plenas y gratuitas; la instrucción moral necesaria
Los capítulos 55-57 son exhortaciones dadas en vista de estas cosas. El capítulo 55 es la gracia gratuita completa, que en consecuencia abraza a los gentiles. Por esta razón se puede aplicar como un principio al evangelio. Su cumplimiento será en el tiempo de bendiciones para la tierra por medio de la presencia del Señor. El capítulo 56 da el carácter moral que es necesario para disfrutar de la bendición, que ya no está de acuerdo con los estrechos principios legales de los días pasados. Su casa será, de hecho, una casa de oración para todos aquellos cuyos corazones están verdaderamente vueltos al Dios de Israel; y se regocijarán en ella. El capítulo 57 denuncia (podemos decir, sobre el mismo principio) a aquellos incluso en Israel que moralmente caminan en contra de la voluntad de Dios. Los justos podrían perecer. Pero sólo los sacaría del mal venidero. Pero ya sea Israel o no, no habría paz para los malvados. Estos tres capítulos dan la instrucción moral que pertenece a esos días. Los fieles serán bendecidos, y los mansos, sean quienes sean; los impíos serán juzgados, sean o no de Israel. Esto cierra, como he dicho, con el capítulo 57 la segunda subdivisión de esta parte de la profecía.