Hebreos 11 (Spanish RV 1909) - Bible Truth Library

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Hebrews 11

He. 11:35 KJV (With Strong’s)

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35

Womenu received their dead raised to life again: and others were tortured, not acceptingw deliverance; that they might obtain a better resurrection:*

u

1 R. 17:22• ²²Y Jehová oyó la voz de Elías, y el alma del niño volvió á sus entrañas, y revivió. (1 R. 17:22)

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2 R. 4:35‑36• ³⁵Volviéndose luego, paséose por la casa á una parte y á otra, y después subió, y tendióse sobre él; y el joven estornudó siete veces, y abrió sus ojos.
³⁶Entonces llamó él á Giezi, y díjole: Llama á esta Sunamita. Y él la llamó. Y entrando ella, él le dijo: Toma tu hijo. (2 R. 4:35‑36)

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Hch. 4:19• ¹⁹Entonces Pedro y Juan, respondiendo, les dijeron: Juzgad si es justo delante de Dios obedecer antes á vosotros que á Dios: (Hch. 4:19)

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Women.

1 R. 17:22‑24• ²²Y Jehová oyó la voz de Elías, y el alma del niño volvió á sus entrañas, y revivió.
²³Tomando luego Elías al niño, trájolo de la cámara á la casa, y diólo á su madre, y díjole Elías: Mira, tu hijo vive.
²⁴Entonces la mujer dijo á Elías: Ahora conozco que tú eres varón de Dios, y que la palabra de Jehová es verdad en tu boca. (1 R. 17:22‑24)

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2 R. 4:27‑37• ²⁷Y luego que llegó al varón de Dios en el monte, asió de sus pies. Y llegóse Giezi para quitarla; mas el varón de Dios le dijo: Déjala, porque su alma está en amargura, y Jehová me ha encubierto el motivo, y no me lo ha revelado.
²⁸Y ella dijo: ¿Pedí yo hijo á mi señor? ¿No dije yo, que no me burlases?
²⁹Entonces dijo él á Giezi: Ciñe tus lomos, y toma mi bordón en tu mano, y ve; y si alguno te encontrare, no lo saludes; y si alguno te saludare, no le respondas: y pondrás mi bordón sobre el rostro del niño.
³⁰Y dijo la madre del niño: Vive Jehová, y vive tu alma, que no te dejaré.
³¹El entonces se levantó, y siguióla. Y Giezi había ido delante de ellos, y había puesto el bordón sobre el rostro del niño, mas ni tenía voz ni sentido; y así se había vuelto para encontrar á Eliseo; y declaróselo, diciendo: El mozo no despierta.
³²Y venido Eliseo á la casa, he aquí el niño que estaba tendido muerto sobre su cama.
³³Entrando él entonces, cerró la puerta sobre ambos, y oró á Jehová.
³⁴Después subió, y echóse sobre el niño, poniendo su boca sobre la boca de él, y sus ojos sobre sus ojos, y sus manos sobre las manos suyas; así se tendió sobre él, y calentóse la carne del joven.
³⁵Volviéndose luego, paséose por la casa á una parte y á otra, y después subió, y tendióse sobre él; y el joven estornudó siete veces, y abrió sus ojos.
³⁶Entonces llamó él á Giezi, y díjole: Llama á esta Sunamita. Y él la llamó. Y entrando ella, él le dijo: Toma tu hijo.
³⁷Y así que ella entró, echóse á sus pies, é inclinóse á tierra: después tomó su hijo, y salióse. (2 R. 4:27‑37)

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Lc. 7:12‑16• ¹²Y como llegó cerca de la puerta de la ciudad, he aquí que sacaban fuera á un difunto, unigénito de su madre, la cual también era viuda: y había con ella grande compañía de la ciudad.
¹³Y como el Señor la vió, compadecióse de ella, y le dice: No llores.
¹⁴Y acercándose, tocó el féretro: y los que lo llevaban, pararon. Y dice: Mancebo, á ti digo, levántate.
¹⁵Entonces se incorporó el que había muerto, y comenzó á hablar. Y dióle á su madre.
¹⁶Y todos tuvieron miedo, y glorificaban á Dios, diciendo: Que un gran profeta se ha levantado entre nosotros; y que Dios ha visitado á su pueblo. (Lc. 7:12‑16)

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Jn. 11:40‑45• ⁴⁰Jesús le dice: ¿No te he dicho que, si creyeres, verás la gloria de Dios?
⁴¹Entonces quitaron la piedra de donde el muerto había sido puesto. Y Jesús, alzando los ojos arriba, dijo: Padre, gracias te doy que me has oído.
⁴²Que yo sabía que siempre me oyes; mas por causa de la compañía que está alrededor, lo dije, para que crean que tú me has enviado.
⁴³Y habiendo dicho estas cosas, clamó á gran voz: Lázaro, ven fuera.
⁴⁴Y el que había estado muerto, salió, atadas las manos y los pies con vendas; y su rostro estaba envuelto en un sudario. Díceles Jesús: Desatadle, y dejadle ir.
⁴⁵Entonces muchos de los Judíos que habían venido á María, y habían visto lo que había hecho Jesús, creyeron en él. (Jn. 11:40‑45)

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Hch. 9:41• ⁴¹Y él le dió la mano, y levantóla: entonces llamando á los santos y las viudas, la presentó viva. (Hch. 9:41)

tortured.

Hch. 22:24‑25,29• ²⁴Mandó el tribuno que le llevasen á la fortaleza, y ordenó que fuese examinado con azotes, para saber por qué causa clamaban así contra él.
²⁵Y como le ataron con correas, Pablo dijo al centurión que estaba presente: ¿Os es lícito azotar á un hombre Romano sin ser condenado?
²⁹Así que, luego se apartaron de él los que le habían de atormentar: y aun el tribuno también tuvo temor, entendido que era Romano, por haberle atado. (Hch. 22:24‑25,29)

not accepting.

Hch. 4:19• ¹⁹Entonces Pedro y Juan, respondiendo, les dijeron: Juzgad si es justo delante de Dios obedecer antes á vosotros que á Dios: (Hch. 4:19)

that they.

Mt. 22:30• ³⁰Porque en la resurrección, ni los hombres tomarán mujeres, ni las mujeres marido; mas son como los ángeles de Dios en el cielo. (Mt. 22:30)

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Mr. 12:25• ²⁵Porque cuando resucitarán de los muertos, ni se casarán, ni serán dados en casamiento, mas son como los ángeles que están en los cielos. (Mr. 12:25)

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Lc. 14:14• ¹⁴Y serás bienaventurado; porque no te pueden retribuir; mas te será recompensado en la resurrección de los justos. (Lc. 14:14)

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Lc. 20:36• ³⁶Porque no pueden ya más morir: porque son iguales á los ángeles, y son hijos de Dios, cuando son hijos de la resurrección. (Lc. 20:36)

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Jn. 5:29• ²⁹Y los que hicieron bien, saldrán á resurrección de vida; mas los que hicieron mal, á resurrección de condenación. (Jn. 5:29)

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Hch. 23:6• ⁶Entonces Pablo, sabiendo que la una parte era de Saduceos, y la otra de Fariseos, clamó en el concilio: Varones hermanos, yo soy Fariseo, hijo de Fariseo: de la esperanza y de la resurrección de los muertos soy yo juzgado. (Hch. 23:6)

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Hch. 24:15• ¹⁵Teniendo esperanza en Dios que ha de haber resurrección de los muertos, así de justos como de injustos, la cual también ellos esperan. (Hch. 24:15)

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1 Co. 15:54• ⁵⁴Y cuando esto corruptible fuere vestido de incorrupción, y esto mortal fuere vestido de inmortalidad, entonces se efectuará la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte con victoria. (1 Co. 15:54)

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Fil. 3:11• ¹¹Si en alguna manera llegase á la resurrección de los muertos. (Fil. 3:11)

• After the transitional first clause of Heb. 11:35, we find an array of sufferings in which faith triumphed of old. Here is what is more akin to what the Christian may have to face at various times and places. (“Hebrews 11:32-36” by W. Kelly)

• {v.35-36} The Apostle passes before us the endurance of faith. (“Faith Overcoming the Present World: Hebrews 11:23-40” by H. Smith)

J. N. Darby Translation

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35

Women received their dead again by resurrection; and others were torturedg, not having accepted deliverance, that they might get a better resurrection;

JND Translation Notes

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g

Perhaps "beaten [to death]."

W. Kelly Translation

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35

Womena received their dead again byb resurrection; and others were tortured, not having accepted their deliverance that they might obtain a better resurrection;

WK Translation Notes

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a

"Women" is the subject, not the object.

b

Or, "out of."