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Isaiah 63

Is. 63:10 KJV (With Strong’s)

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10
But they rebelled
marah (Hebrew #4784)
to be (causatively, make) bitter (or unpleasant); (figuratively) to rebel (or resist; causatively, to provoke)
KJV usage: bitter, change, be disobedient, disobey, grievously, provocation, provoke(-ing), (be) rebel (against, -lious).
Pronounce: maw-raw'
Origin: a primitive root
, and vexed
`atsab (Hebrew #6087)
properly, to carve, i.e. fabricate or fashion; hence (in a bad sense) to worry, pain or anger
KJV usage: displease, grieve, hurt, make, be sorry, vex, worship, wrest.
Pronounce: aw-tsab'
Origin: a primitive root
e his holy
qodesh (Hebrew #6944)
a sacred place or thing; rarely abstract, sanctity
KJV usage: consecrated (thing), dedicated (thing), hallowed (thing), holiness, (X most) holy (X day, portion, thing), saint, sanctuary.
Pronounce: ko'-desh
Origin: from 6942
Spirit
ruwach (Hebrew #7307)
wind; by resemblance breath, i.e. a sensible (or even violent) exhalation; figuratively, life, anger, unsubstantiality; by extension, a region of the sky; by resemblance spirit, but only of a rational being (including its expression and functions)
KJV usage: air, anger, blast, breath, X cool, courage, mind, X quarter, X side, spirit((-ual)), tempest, X vain, ((whirl-))wind(-y).
Pronounce: roo'-akh
Origin: from 7306
: therefore he was turned
haphak (Hebrew #2015)
to turn about or over; by implication, to change, overturn, return, pervert
KJV usage: X become, change, come, be converted, give, make (a bed), overthrow (-turn), perverse, retire, tumble, turn (again, aside, back, to the contrary, every way).
Pronounce: haw-fak'
Origin: a primitive root
to be their enemy
'oyeb (Hebrew #341)
active participle of 340; hating; an adversary
KJV usage: enemy, foe.
Pronounce: o-yabe'
Origin: or (fully) owyeb {o-yabe'}
f, and he fought
lacham (Hebrew #3898)
to feed on; figuratively, to consume; by implication, to battle (as destruction)
KJV usage: devour, eat, X ever, fight(-ing), overcome, prevail, (make) war(-ring).
Pronounce: law-kham'
Origin: a primitive root
against them.

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Cross References

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Ministry on This Verse

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they rebelled.
Is. 1:2• 2Oid, cielos, y escucha tú, tierra; porque habla Jehová: Crié hijos, y engrandecílos, y ellos se rebelaron contra mí. (Is. 1:2)
;
Is. 65:2• 2Extendí mis manos todo el día á pueblo rebelde, el cual anda por camino no bueno, en pos de sus pensamientos; (Is. 65:2)
;
Éx. 15:24• 24Entonces el pueblo murmuró contra Moisés, y dijo: ¿Qué hemos de beber? (Éx. 15:24)
;
Éx. 16:8• 8Y dijo Moisés: Jehová os dará á la tarde carne para comer, y á la mañana pan en hartura; por cuanto Jehová ha oído vuestras murmuraciones con que habéis murmurado contra él: que nosotros, ¿qué somos? vuestras murmuraciones no son contra nosotros, sino contra Jehová. (Éx. 16:8)
;
Éx. 32:8• 8Presto se han apartado del camino que yo les mandé, y se han hecho un becerro de fundición, y lo han adorado, y han sacrificado á él, y han dicho: Israel, estos son tus dioses, que te sacaron de la tierra de Egipto. (Éx. 32:8)
;
Nm. 14:9‑11• 9Por tanto, no seáis rebeldes contra Jehová, ni temáis al pueblo de aquesta tierra, porque nuestro pan son: su amparo se ha apartado de ellos, y con nosotros está Jehová: no los temáis.
10Entonces toda la multitud habló de apedrearlos con piedras. Mas la gloria de Jehová se mostró en el tabernáculo del testimonio á todos los hijos de Israel.
11Y Jehová dijo á Moisés: ¿Hasta cuándo me ha de irritar este pueblo? ¿hasta cuándo no me ha de creer con todas las señales que he hecho en medio de ellos?.
(Nm. 14:9‑11)
;
Nm. 16:1‑35• 1Y Coré, hijo de Ishar, hijo de Coath, hijo de Leví; y Dathán y Abiram, hijos de Eliab; y Hon, hijo de Peleth, de los hijos de Rubén, tomaron gente,
2Y levantáronse contra Moisés con doscientos y cincuenta varones de los hijos de Israel, príncipes de la congregación, de los del consejo, varones de nombre;
3Y se juntaron contra Moisés y Aarón, y les dijeron: Básteos, porque toda la congregación, todos ellos son santos, y en medio de ellos está Jehová: ¿por qué, pues, os levantáis vosotros sobre la congregación de Jehová?
4Y como lo oyó Moisés, echóse sobre su rostro;
5Y habló á Coré y á todo su séquito, diciendo: Mañana mostrará Jehová quién es suyo, y al santo harálo llegar á sí; y al que él escogiere, él lo allegará á sí.
6Haced esto: tomad incensarios, Coré y todo su séquito:
7Y poned fuego en ellos, y poned en ellos sahumerio delante de Jehová mañana; y será que el varón á quien Jehová escogiere, aquel será el santo: básteos esto, hijos de Leví.
8Dijo más Moisés á Coré: Oid ahora, hijos de Leví:
9¿Os es poco que el Dios de Israel os haya apartado de la congregación de Israel, haciéndoos allegar á sí para que ministraseis en el servicio del tabernáculo de Jehová, y estuvieseis delante de la congregación para ministrarles?
10¿Y que te hizo acercar á ti, y á todos tus hermanos los hijos de Leví contigo; para que procuréis también el sacerdocio?
11Por tanto, tú y todo tu séquito sois los que os juntáis contra Jehová: pues Aarón, ¿qué es para que contra él murmuréis?
12Y envió Moisés á llamar á Dathán y Abiram, hijos de Eliab; mas ellos respondieron: No iremos allá:
13¿Es poco que nos hayas hecho venir de una tierra que destila leche y miel, para hacernos morir en el desierto, sino que también te enseñorees de nosotros imperiosamente?
14Ni tampoco nos has metido tú en tierra que fluya leche y miel, ni nos has dado heredades de tierras y viñas: ¿has de arrancar los ojos de estos hombres? No subiremos.
15Entonces Moisés se enojó en gran manera, y dijo á Jehová: No mires á su presente: ni aun un asno he tomado de ellos, ni á ninguno de ellos he hecho mal.
16Después dijo Moisés á Coré: Tú y todo tu séquito, poneos mañana delante de Jehová; tú, y ellos, y Aarón:
17Y tomad cada uno su incensario, y poned sahumerio en ellos, y allegad delante de Jehová cada uno su incensario: doscientos y cincuenta incensarios: tú también, y Aarón, cada uno con su incensario.
18Y tomaron cada uno su incensario, y pusieron en ellos fuego, y echaron en ellos sahumerio, y pusiéronse á la puerta del tabernáculo del testimonio con Moisés y Aarón.
19Ya Coré había hecho juntar contra ellos toda la congregación á la puerta del tabernáculo del testimonio: entonces la gloria de Jehová apareció á toda la congregación.
20Y Jehová habló á Moisés y á Aarón, diciendo:
21Apartaos de entre esta congregación, y consumirlos he en un momento.
22Y ellos se echaron sobre sus rostros, y dijeron: Dios, Dios de los espíritus de toda carne, ¿no es un hombre el que pecó? ¿y airarte has tu contra toda la congregación?
23Entonces Jehová habló á Moisés, diciendo:
24Habla á la congregación, diciendo: Apartaos de en derredor de la tienda de Coré, Dathán, y Abiram.
25Y Moisés se levantó, y fué á Dathán y Abiram; y los ancianos de Israel fueron en pos de él.
26Y él habló á la congregación, diciendo: Apartaos ahora de las tiendas de estos impíos hombres, y no toquéis ninguna cosa suya, por que no perezcáis en todos sus pecados.
27Y apartáronse de las tiendas de Coré, de Dathán, y de Abiram en derredor: y Dathán y Abiram salieron y pusiéronse á las puertas de sus tiendas, con sus mujeres, y sus hijos, y sus chiquitos.
28Y dijo Moisés: En esto conoceréis que Jehová me ha enviado para que hiciese todas estas cosas: que no de mi corazón las hice.
29Si como mueren todos los hombres murieren éstos, ó si fueren ellos visitados á la manera de todos los hombres, Jehová no me envió.
30Mas si Jehová hiciere una nueva cosa, y la tierra abriere su boca, y los tragare con todas sus cosas, y descendieren vivos al abismo, entonces conoceréis que estos hombres irritaron á Jehová.
31Y aconteció, que en acabando él de hablar todas estas palabras, rompióse la tierra que estaba debajo de ellos:
32Y abrió la tierra su boca, y tragólos á ellos, y á sus casas, y á todos los hombres de Coré, y á toda su hacienda.
33Y ellos, con todo lo que tenían, descendieron vivos al abismo, y cubriólos la tierra, y perecieron de en medio de la congregación.
34Y todo Israel, los que estaban en derredor de ellos, huyeron al grito de ellos; porque decían: No nos trague también la tierra.
35Y salió fuego de Jehová, y consumió los doscientos y cincuenta hombres que ofrecían el sahumerio.
(Nm. 16:1‑35)
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Dt. 9:7,22‑24• 7Acuérdate, no te olvides que has provocado á ira á Jehová tu Dios en el desierto: desde el día que saliste de la tierra de Egipto, hasta que entrasteis en este lugar, habéis sido rebeldes á Jehová.
22También en Tabera, y en Massa, y en Kibroth-hataavah, enojasteis á Jehová.
23Y cuando Jehová os envió desde Cades-barnea, diciendo: Subid y poseed la tierra que yo os he dado; también fuisteis rebeldes al dicho de Jehová vuestro Dios, y no lo creisteis, ni obedecisteis á su voz.
24Rebeldes habéis sido á Jehová desde el día que yo os conozco.
(Dt. 9:7,22‑24)
;
Neh. 9:16‑17,26,29• 16Mas ellos y nuestros padres hicieron soberbiamente, y endurecieron su cerviz, y no escucharon tus mandamientos,
17Y no quisieron oir, ni se acordaron de tus maravillas que habías hecho con ellos; antes endurecieron su cerviz, y en su rebelión pensaron poner caudillo para volverse á su servidumbre. Tú empero, eres Dios de perdones, clemente y piadoso, tardo para la ira, y de mucha misericordia, que no los dejaste.
26Empero te irritaron, y rebeláronse contra ti, y echaron tu ley tras sus espaldas, y mataron tus profetas que protestaban contra ellos para convertirlos á ti; é hicieron grandes abominaciones.
29Y protestásteles que se volviesen á tu ley; mas ellos hicieron soberbiamente, y no oyeron tus mandamientos, sino que pecaron contra tus juicios, los cuales si el hombre hiciere, en ellos vivirá; y dieron hombro renitente, y endurecieron su cerviz, y no escucharon.
(Neh. 9:16‑17,26,29)
;
Lm. 1:18,20• 18Jehová es justo; que yo contra su boca me rebelé. Oid ahora, pueblos todos, y ved mi dolor: Mis vírgenes y mis mancebos fueron en cautiverio.
20Mira, oh Jehová, que estoy atribulada: mis entrañas rugen, Mi corazón está trastornado en medio de mí; porque me rebelé desaforadamente: De fuera deshijó el cuchillo, de dentro parece una muerte.
(Lm. 1:18,20)
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Ez. 2:3,7• 3Y díjome: Hijo del hombre, yo te envío á los hijos de Israel, á gentes rebeldes que se rebelaron contra mí: ellos y sus padres se han rebelado contra mí hasta este mismo día.
7Les hablarás pues mis palabras, escuchen ó dejen de escuchar; porque son muy rebeldes.
(Ez. 2:3,7)
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Ez. 20:8,13,21• 8Mas ellos se rebelaron contra mí, y no quisieron obedecerme: no echó de sí cada uno las abominaciones de sus ojos, ni dejaron los ídolos de Egipto; y dije que derramaría mi ira sobre ellos, para cumplir mi enojo en ellos en medio de la tierra de Egipto.
13Mas rebeláronse contra mí la casa de Israel en el desierto; no anduvieron en mis ordenanzas, y desecharon mis derechos, los cuales el hombre que los hiciere, vivirá en ellos; y mis sábados profanaron en gran manera; dije, por tanto, que había de derramar sobre ellos mi ira en el desierto para consumirlos.
21Y los hijos se rebelaron contra mí: no anduvieron en mis ordenanzas, ni guardaron mis derechos para ponerlos por obra, los cuales el hombre que los cumpliere, vivirá en ellos; profanaron mis sábados. Dije entonces que derramaría mi ira sobre ellos, para cumplir mi enojo en ellos en el desierto.
(Ez. 20:8,13,21)
vexed.
he was.
Éx. 23:21• 21Guárdate delante de él, y oye su voz; no le seas rebelde; porque él no perdonará vuestra rebelión: porque mi nombre está en él. (Éx. 23:21)
;
Lv. 26:17‑46• 17Y pondré mi ira sobre vosotros, y seréis heridos delante de vuestros enemigos; y los que os aborrecen se enseñorearán de vosotros, y huiréis sin que haya quien os persiga.
18Y si aun con estas cosas no me oyereis, yo tornaré á castigaros siete veces más por vuestros pecados.
19Y quebrantaré la soberbia de vuestra fortaleza, y tornaré vuestro cielo como hierro, y vuestra tierra como metal:
20Y vuestra fuerza se consumirá en vano; que vuestra tierra no dará su esquilmo, y los árboles de la tierra no darán su fruto.
21Y si anduviereis conmigo en oposición, y no me quisiereis oír, yo añadiré sobre vosotros siete veces más plagas según vuestros pecados.
22Enviaré también contra vosotros bestias fieras que os arrebaten los hijos, y destruyan vuestros animales, y os apoquen, y vuestros caminos sean desiertos.
23Y si con estas cosas no fuereis corregidos, sino que anduviereis conmigo en oposición,
24Yo también procederé con vosotros, en oposición y os heriré aún siete veces por vuestros pecados:
25Y traeré sobre vosotros espada vengadora, en vindicación del pacto; y os recogeréis á vuestras ciudades; mas yo enviaré pestilencia entre vosotros, y seréis entregados en mano del enemigo.
26Cuando yo os quebrantare el arrimo del pan, cocerán diez mujeres vuestro pan en un horno, y os devolverán vuestro pan por peso; y comeréis, y no os hartaréis.
27Y si con esto no me oyereis, mas procediereis conmigo en oposición,
28Yo procederé con vosotros en contra y con ira, y os catigaré aún siete veces por vuestros pecados.
29Y comeréis las carnes de vuestros hijos, y comeréis las carnes de vuestras hijas:
30Y destruiré vuestros altos, y talaré vuestras imágenes, y pondré vuestros cuerpos muertos sobre los cuerpos muertos de vuestros ídolos, y mi alma os abominará:
31Y pondré vuestras ciudades en desierto, y asolaré vuestros santuarios, y no oleré la fragancia de vuestro suave perfume.
32Yo asolaré también la tierra, y se pasmarán de ella vuestros enemigos que en ella moran:
33Y á vosotros os esparciré por las gentes, y desenvainaré espada en pos de vosotros: y vuestra tierra estará asolada, y yermas vuestras ciudades.
34Entonces la tierra holgará sus sábados todos los días que estuviere asolada, y vosotros en la tierra de vuestros enemigos: la tierra descansará entonces y gozará sus sábados.
35Todo el tiempo que estará asolada, holgará lo que no holgó en vuestros sábados mientras habitabais en ella.
36Y á los que quedaren de vosotros infundiré en sus corazones tal cobardía, en la tierra de sus enemigos, que el sonido de una hoja movida los perseguirá, y huirán como de cuchillo, y caerán sin que nadie los persiga:
37Y tropezarán los unos en los otros, como si huyeran delante de cuchillo, aunque nadie los persiga; y no podréis resistir delante de vuestros enemigos.
38Y pereceréis entre las gentes, y la tierra de vuestros enemigos os consumirá.
39Y los que quedaren de vosotros decaerán en las tierras de vuestros enemigos por su iniquidad; y por la iniquidad de sus padres decaerán con ellos:
40Y confesarán su iniquidad, y la iniquidad de sus padres, por su prevaricación con que prevaricaron contra mí: y también porque anduvieron conmigo en oposición,
41Yo también habré andado con ellos en contra, y los habré metido en la tierra de sus enemigos: y entonces se humillará su corazón incircunciso, y reconocerán su pecado;
42Y yo me acordaré de mi pacto con Jacob, y asimismo de mi pacto con Isaac, y también de mi pacto con Abraham me acordaré; y haré memoria de la tierra.
43Que la tierra estará desamparada de ellos, y holgará sus sábados, estando yerma á causa de ellos; mas entretanto se someterán al castigo de sus iniquidades: por cuanto menospreciaron mis derechos, y tuvo el alma de ellos fastidio de mis estatutos.
44Y aun con todo esto, estando ellos en tierra de sus enemigos, yo no los desecharé, ni los abominaré para consumirlos, invalidando mi pacto con ellos: porque yo Jehová soy su Dios:
45Antes me acordaré de ellos por el pacto antiguo, cuando los saqué de la tierra de Egipto á los ojos de las gentes, para ser su Dios: Yo Jehová.
46Estos son los decretos, derechos y leyes que estableció Jehová entre sí y los hijos de Israel en el monte de Sinaí por mano de Moisés.
(Lv. 26:17‑46)
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Dt. 28:15‑68• 15Y será, si no oyeres la voz de Jehová tu Dios, para cuidar de poner por obra todos sus mandamientos y sus estatutos, que yo te intimo hoy, que vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te alcanzarán.
16Maldito serás tu en la ciudad, y maldito en el campo.
17Maldito tu canastillo, y tus sobras.
18Maldito el fruto de tu vientre, y el fruto de tu tierra, y la cría de tus vacas, y los rebaños de tus ovejas.
19Maldito serás en tu entrar, y maldito en tu salir.
20Y Jehová enviará contra ti la maldición, quebranto y asombro en todo cuanto pusieres mano é hicieres, hasta que seas destruído, y perezcas presto á causa de la maldad de tus obras, por las cuales me habrás dejado.
21Jehová hará que se te pegue mortandad, hasta que te consuma de la tierra á la cual entras para poseerla.
22Jehová te herirá de tisis, y de fiebre, y de ardor, y de calor, y de cuchillo, y de calamidad repentina, y con añublo; y perseguirte han hasta que perezcas.
23Y tus cielos que están sobre tu cabeza, serán de metal; y la tierra que está debajo de ti, de hierro.
24Dará Jehová por lluvia á tu tierra polvo y ceniza: de los cielos descenderán sobre ti hasta que perezcas.
25Jehová te entregará herido delante de tus enemigos: por un camino saldrás á ellos, y por siete caminos huirás delante de ellos: y serás sacudido á todos los reinos de la tierra.
26Y será tu cuerpo muerto por comida á toda ave del cielo, y bestia de la tierra, y no habrá quien las espante.
27Jehová te herirá de la plaga de Egipto, y con almorranas, y con sarna, y con comezón, de que no puedas ser curado.
28Jehová te herirá con locura, y con ceguedad, y con pasmo de corazón.
29Y palparás al mediodía, como palpa el ciego en la oscuridad, y no serás prosperado en tus caminos: y nunca serás sino oprimido y robado todos los días, y no habrá quien te salve.
30Te desposarás con mujer, y otro varón dormirá con ella; edificarás casa, y no habitarás en ella; plantarás viña, y no la vendimiarás.
31Tu buey será matado delante de tus ojos, y tú no comerás de él; tu asno será arrebatado de delante de ti, y no se te volverá; tus ovejas serán dadas á tus enemigos, y no tendrás quien te las rescate.
32Tus hijos y tus hijas serán entregados á otro pueblo, y tus ojos lo verán, y desfallecerán por ellos todo el día: y no habrá fuerza en tu mano.
33El fruto de tu tierra y todo tu trabajo comerá pueblo que no conociste; y nunca serás sino oprimido y quebrantado todos los días.
34Y enloquecerás á causa de lo que verás con tus ojos.
35Herirte ha Jehová con maligna pústula en las rodillas y en las piernas, sin que puedas ser curado: aun desde la planta de tu pie hasta tu mollera.
36Jehová llevará á ti, y á tu rey que hubieres puesto sobre ti, á gente que no conociste tú ni tus padres; y allá servirás á dioses ajenos, al palo y á la piedra.
37Y serás por pasmo, por ejemplo y por fábula, á todos los pueblos á los cuales te llevará Jehová.
38Sacarás mucha simiente al campo, y cogerás poco: porque la langosta lo consumirá.
39Plantarás viñas y labrarás, mas no beberás vino, ni cogerás uvas; porque el gusano las comerá.
40Tendrás olivas en todo tu término, mas no te ungirás con el aceite; porque tu aceituna se caerá.
41Hijos é hijas engendrarás, y no serán para ti; porque irán en cautiverio.
42Toda tu arboleda y el fruto de tu tierra consumirá la langosta.
43El extranjero que estará en medio de ti subirá sobre ti muy alto, y tú serás puesto muy bajo.
44El te prestará á ti, y tú no prestarás á él: él será por cabeza, y tú serás por cola.
45Y vendrán sobre ti todas estas maldiciones, y te perseguirán, y te alcanzarán hasta que perezcas; por cuanto no habrás atendido á la voz de Jehová tu Dios, para guardar sus mandamientos y sus estatutos, que él te mandó:
46Y serán en ti por señal y por maravilla, y en tu simiente para siempre.
47Por cuanto no serviste á Jehová tu Dios con alegría y con gozo de corazón, por la abundancia de todas las cosas;
48Servirás por tanto á tus enemigos que enviare Jehová contra ti, con hambre y con sed y con desnudez, y con falta de todas las cosas; y él pondrá yugo de hierro sobre tu cuello, hasta destruirte.
49Jehová traerá sobre ti gente de lejos, del cabo de la tierra, que vuele como águila, gente cuya lengua no entiendas;
50Gente fiera de rostro, que no tendrá respeto al anciano, ni perdonará al niño:
51Y comerá el fruto de tu bestia y el fruto de tu tierra, hasta que perezcas: y no te dejará grano, ni mosto, ni aceite, ni la cría de tus vacas, ni los rebaños de tus ovejas, hasta destruirte.
52Y te pondrá cerco en todas tus ciudades, hasta que caigan tus muros altos y encastillados en que tú confías, en toda tu tierra: te cercará, pues, en todas tus ciudades y en toda tu tierra, que Jehová tu Dios te habrá dado.
53Y comerás el fruto de tu vientre, la carne de tus hijos y de tus hijas que Jehová tu Dios te dió, en el cerco y en al apuro con que te angustiará tu enemigo.
54El hombre tierno en ti, y el muy delicado, su ojo será maligno para con su hermano, y para con la mujer de su seno, y para con el resto de sus hijos que le quedaren;
55Para no dar á alguno de ellos de la carne de sus hijos, que él comerá, porque nada le habrá quedado, en el cerco y en el apuro con que tu enemigo te oprimirá en todas tus ciudades.
56La tierna y la delicada entre vosotros, que nunca la planta de su pie probó á sentar sobre la tierra, de ternura y delicadeza, su ojo será maligno para con el marido de su seno, y para con su hijo, y para con su hija,
57Y para con su chiquita que sale de entre sus pies, y para con sus hijos que pariere; pues los comerá escondidamente, á falta de todo, en el cerco y en el apuro con que tu enemigo te oprimirá en tus ciudades.
58Si no cuidares de poner por obra todas las palabras de aquesta ley que están escritas en este libro, temiendo este nombre glorioso y terrible, JEHOVÁ TU DIOS,
59Jehová aumentará maravillosamente tus plagas y las plagas de tu simiente, plagas grandes y estables, y enfermedades malignas y duraderas;
60Y hará volver sobre ti todos los males de Egipto, delante de los cuales temiste, y se te pegarán.
61Asismismo toda enfermedad y toda plaga que no está escrita en el libro de esta ley, Jehová la enviará sobre ti, hasta que tú seas destruído.
62Y quedaréis en poca gente, en lugar de haber sido como las estrellas del cielo en multitud; por cuanto no obedeciste á la voz de Jehová tu Dios.
63Y será que como Jehová se gozó sobre vosotros para haceros bien, y para multiplicaros, así se gozará Jehová sobre vosotros para arruinaros, y para destruiros; y seréis arrancados de sobre la tierra, á la cual entráis para poseerla.
64Y Jehová te esparcirá por todos los pueblos, desde el un cabo de la tierra hasta el otro cabo de ella; y allí servirás á dioses ajenos que no conociste tú ni tus padres, al leño y á la piedra.
65Y ni aun entre las mismas gentes descansarás, ni la planta de tu pie tendrá reposo; que allí te dará Jehová corazón temeroso, y caimiento de ojos, y tristeza de alma:
66Y tendrás tu vida como colgada delante de ti, y estarás temeroso de noche y de día, y no confiarás de tu vida.
67Por la mañana dirás: Quién diera fuese la tarde! y á la tarde dirás: Quién diera fuese la mañana! por el miedo de tu corazón con que estarás amedrentado, y por lo que verán tus ojos.
68Y Jehová te hará tornar á Egipto en navíos por el camino del cual te ha dicho: Nunca más volveréis: y allí seréis vendidos á vuestros enemigos por esclavos y por esclavas, y no habrá quien os compre.
(Dt. 28:15‑68)
;
Dt. 32:19‑25• 19Y vió lo Jehová, y encendióse en ira, por el menosprecio de sus hijos y de sus hijas.
20Y dijo: Esconderé de ellos mi rostro, Veré cuál será su postrimería: Que son generación de perversidades, Hijos sin fe.
21Ellos me movieron á celos con lo que no es Dios; Hiciéronme ensañar con sus vanidades: Yo también los moveré á celos con un pueblo que no es pueblo, Con gente insensata los haré ensañar.
22Porque fuego se encenderá en mi furor, Y arderá hasta el profundo; Y devorará la tierra y sus frutos, Y abrasará los fundamentos de los montes.
23Yo allegaré males sobre ellos; Emplearé en ellos mis saetas.
24Consumidos serán de hambre, y comidos de fiebre ardiente Y de amarga pestilencia; Diente de bestias enviaré también sobre ellos, Con veneno de serpiente de la tierra.
25De fuera desolará la espada, Y dentro de las cámaras el espanto: Así al mancebo como á la doncella, Al que mama como el hombre cano.
(Dt. 32:19‑25)
;
Jer. 21:5• 5Y pelearé contra vosotros con mano alzada y con brazo fuerte, y con furor, y enojo, é ira grande: (Jer. 21:5)
;
Jer. 30:14• 14Todos tus enamorados te olvidaron; no te buscan; porque de herida de enemigo te herí, con azote de cruel, á causa de la muchedumbre de tu maldad, y de la multitud de tus pecados. (Jer. 30:14)
;
Lm. 2:4‑5• 4Entesó su arco como enemigo, afirmó su mano derecha como adversario, Y mató toda cosa hermosa á la vista: En la tienda de la hija de Sión derramó como fuego su enojo.
5Fué el Señor como enemigo, destruyó a Israel; Destruyó todos sus palacios, disipó sus fortalezas: Y multiplicó en la hija de Judá la tristeza y lamento.
(Lm. 2:4‑5)
;
Mt. 22:7• 7Y el rey, oyendo esto, se enojó; y enviando sus ejércitos, destruyó á aquellos homicidas, y puso fuego á su ciudad. (Mt. 22:7)
 On God’s part therefore nothing had been lacking in His dealings with Israel; so what had been their response to all this goodness? Verse 10 gives the sad answer, “But they rebelled, and grieved His Holy Spirit”. As a result of this His holy government had to come into action, and He became their adversary. Here we have in few words what Stephen amplified and brought up to date, as recorded in Acts 7. (Isaiah 63 by F.B. Hole)

J. N. Darby Translation

+
10
But they rebelled and grieved his holy Spiritf: and he turned to be their enemy; himself, he fought against them.

JND Translation Notes

+
f
Or "the Spirit of his holiness"; and so ver. 11.