Articles on

Proverbs 21

Pr. 21:13 KJV (With Strong’s)

+
13
Whosod stoppeth
'atam (Hebrew #331)
to close (the lips or ears); by analology to contract (a window by bevelled jambs)
KJV usage: narrow, shut, stop.
Pronounce: aw-tam'
Origin: a primitive root
his ears
'ozen (Hebrew #241)
broadness. i.e. (concrete) the ear (from its form in man)
KJV usage: + advertise, audience, + displease, ear, hearing, + show.
Pronounce: o'-zen
Origin: from 238
at the cry
za`aq (Hebrew #2201)
from 2199; a shriek or outcry
KJV usage: cry(-ing).
Pronounce: zah'-ak
Origin: and (feminine) zoaqah {zeh-aw-kaw'}
of the poor
dal (Hebrew #1800)
properly, dangling, i.e. (by implication) weak or thin
KJV usage: lean, needy, poor (man), weaker.
Pronounce: dal
Origin: from 1809
, he also shall cry
qara' (Hebrew #7121)
to call out to (i.e. properly, address by name, but used in a wide variety of applications)
KJV usage: bewray (self), that are bidden, call (for, forth, self, upon), cry (unto), (be) famous, guest, invite, mention, (give) name, preach, (make) proclaim(- ation), pronounce, publish, read, renowned, say.
Pronounce: kaw-raw'
Origin: a primitive root (rather identical with 7122 through the idea of accosting a person met)
himself, but shall not be heard
`anah (Hebrew #6030)
properly, to eye or (generally) to heed, i.e. pay attention; by implication, to respond; by extens. to begin to speak; specifically to sing, shout, testify, announce
KJV usage: give account, afflict (by mistake for 6031), (cause to, give) answer, bring low (by mistake for 6031), cry, hear, Leannoth, lift up, say, X scholar, (give a) shout, sing (together by course), speak, testify, utter, (bear) witness. See also 1042, 1043.
Pronounce: aw-naw'
Origin: a primitive root
.

More on:

+

Cross References

+

Ministry on This Verse

+
stoppeth.
at.
Pr. 28:27• 27El que da al pobre, no tendrá pobreza: Mas el que aparta sus ojos, tendrá muchas maldiciones. (Pr. 28:27)
;
Dt. 15:7‑11• 7Cuando hubiere en ti menesteroso de alguno de tus hermanos en alguna de tus ciudades, en tu tierra que Jehová tu Dios te da, no endurecerás tu corazón, ni cerrarás tu mano á tu hermano pobre:
8Mas abrirás á él tu mano liberalmente, y en efecto le prestarás lo que basta, lo que hubiere menester.
9Guárdate que no haya en tu corazón perverso pensamiento, diciendo: Cerca está el año séptimo, el de la remisión; y tu ojo sea maligno sobre tu hermano menesteroso para no darle: que él podrá clamar contra ti á Jehová, y se te imputará á pecado.
10Sin falta le darás, y no sea tu corazón maligno cuando le dieres: que por ello te bendecirá Jehová tu Dios en todos tus hechos, y en todo lo que pusieres mano.
11Porque no faltarán menesterosos de en medio de la tierra; por eso yo te mando, diciendo: Abrirás tu mano á tu hermano, á tu pobre, y á tu menesteroso en tu tierra.
(Dt. 15:7‑11)
;
Neh. 5:1‑5,13• 1Entonces fué grande el clamor del pueblo y de sus mujeres contra los Judíos sus hermanos.
2Y había quien decía: Nosotros, nuestros hijos y nuestras hijas, somos muchos: hemos por tanto tomado grano para comer y vivir.
3Y había quienes decían: Hemos empeñado nuestras tierras, y nuestras viñas, y nuestras casas, para comprar grano en el hambre.
4Y había quienes decían: Hemos tomado prestado dinero para el tributo del rey, sobre nuestras tierras y viñas.
5Ahora bien, nuestra carne es como la carne de nuestros hermanos, nuestros hijos como sus hijos; y he aquí que nosotros sujetamos nuestros hijos y nuestras hijas á servidumbre, y hay algunas de nuestras hijas sujetas: mas no hay facultad en nuestras manos para rescatarlas, porque nuestras tierras y nuestras viñas son de otros.
13Además sacudí mi vestido, y dije: Así sacuda Dios de su casa y de su trabajo á todo hombre que no cumpliere esto, y así sea sacudido y vacío. Y respondió toda la congregación: -Amén! Y alabaron á Jehová. Y el pueblo hizo conforme á esto.
(Neh. 5:1‑5,13)
;
Is. 1:15‑17• 15Cuando extendiereis vuestras manos, yo esconderé de vosotros mis ojos: asimismo cuando multiplicareis la oración, yo no oiré: llenas están de sangre vuestras manos.
16Lavad, limpiaos; quitad la iniquidad de vuestras obras de ante mis ojos; dejad de hacer lo malo:
17Aprended á hacer bien: buscad juicio, restituid al agraviado, oid en derecho al huérfano, amparad á la viuda.
(Is. 1:15‑17)
;
Is. 58:6‑9• 6¿No es antes el ayuno que yo escogí, desatar las ligaduras de impiedad, deshacer los haces de opresión, y dejar ir libres á los quebrantados, y que rompáis todo yugo?
7¿No es que partas tu pan con el hambriento, y á los pobres errantes metas en casa; que cuando vieres al desnudo, lo cubras, y no te escondas de tu carne?
8Entonces nacerá tu luz como el alba, y tu salud se dejará ver presto; é irá tu justicia delante de ti, y la gloria de Jehová será tu retaguardia.
9Entonces invocarás, y oirte ha Jehová; clamarás, y dirá él: Heme aquí. Si quitares de en medio de ti el yugo, el extender el dedo, y hablar vanidad;
(Is. 58:6‑9)
;
Jer. 34:16‑17• 16Pero os habéis vuelto y profanado mi nombre, y habéis tornado á tomar cada uno su siervo y cada uno su sierva, que habíais dejado libres á su voluntad; y los habéis sujetado á seros siervos y siervas.
17Por tanto, así ha dicho Jehová: Vosotros no me habéis oído en promulgar cada uno libertad á su hermano, y cada uno á su compañero: he aquí que yo os promulgo libertad, dice Jehová, á cuchillo y á pestilencia, y á hambre; y os pondré en remoción á todos los reinos de la tierra.
(Jer. 34:16‑17)
;
Zac. 7:9‑13• 9Así habló Jehová de los ejércitos, diciendo: Juzgad juicio verdadero, y haced misericordia y piedad cada cual con su hermano:
10No agraviéis á la viuda, ni al huérfano, ni al extranjero, ni al pobre; ni ninguno piense mal en su corazón contra su hermano.
11Empero no quisieron escuchar, antes dieron hombro rebelado, y agravaron sus oídos para no oir:
12Y pusieron su corazón como diamante, para no oir la ley ni las palabras que Jehová de los ejércitos enviaba por su espíritu, por mano de los profetas primeros: fué, por tanto, hecho grande castigo por Jehová de los ejércitos.
13Y aconteció que como él clamó, y no escucharon, así ellos clamaron, y yo no escuché, dice Jehová de los ejércitos;
(Zac. 7:9‑13)
;
Mt. 6:14• 14Porque si perdonareis á los hombres sus ofensas, os perdonará también á vosotros vuestro Padre celestial. (Mt. 6:14)
;
Mt. 7:2• 2Porque con el juicio con que juzgáis, seréis juzgados; y con la medida con que medís, os volverán á medir. (Mt. 7:2)
;
Mt. 18:30‑35• 30Mas él no quiso; sino fué, y le echó en la cárcel hasta que pagase la deuda.
31Y viendo sus consiervos lo que pasaba, se entristecieron mucho, y viniendo, declararon á su señor todo lo que había pasado.
32Entonces llamándole su señor, le dice: Siervo malvado, toda aquella deuda te perdoné, porque me rogaste:
33¿No te convenía también á ti tener misericordia de tu consiervo, como también yo tuve misericordia de ti?
34Entonces su señor, enojado, le entregó á los verdugos, hasta que pagase todo lo que le debía.
35Así también hará con vosotros mi Padre celestial, si no perdonareis de vuestros corazones cada uno á su hermano sus ofensas.
(Mt. 18:30‑35)
;
Mt. 25:41‑46• 41Entonces dirá también á los que estarán á la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y para sus ángeles:
42Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber;
43Fuí huésped, y no me recogisteis; desnudo, y no me cubristeis; enfermo, y en la cárcel, y no me visitasteis.
44Entonces también ellos le responderán, diciendo: Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, ó sediento, ó huésped, ó desnudo, ó enfermo, ó en la cárcel, y no te servimos?
45Entonces les responderá, diciendo: De cierto os digo que en cuanto no lo hicisteis á uno de estos pequeñitos, ni á mí lo hicisteis.
46E irán éstos al tormento eterno, y los justos á la vida eterna.
(Mt. 25:41‑46)
;
Stg. 2:13‑16• 13Porque juicio sin misericordia será hecho con aquel que no hiciere misericordia: y la misericordia se gloría contra el juicio.
14Hermanos míos, ¿qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras? ¿ Podrá la fe salvarle?
15Y si el hermano ó la hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de cada día,
16Y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y hartaos; pero no les diereis las cosas que son necesarias para el cuerpo: ¿qué aprovechará?
(Stg. 2:13‑16)
cry himself.
 The destitute and afflicted have a faithful Friend in the God who created them. His concern is very real, and He takes note of all done for or against them. Especially is this so when they are of the household of faith. See the pre-millennial judgment of the nations of the earth, as pictured by our Lord Himself in Matthew 25:31-46. (Proverbs Twenty-One by H.A. Ironside)

J. N. Darby Translation

+
13
Whoso stoppeth his ears at the cry of the poor, he also himself shall cry, and shall not be heard.