Nm. 21:3,21‑35• 3Y Jehová escuchó la voz de Israel, y entregó al Cananeo, y destruyólos á ellos y á sus ciudades; y llamó el nombre de aquel lugar Horma.
21Y envió Israel embajadores á Sehón, rey de los Amorrheos, diciendo:
22Pasaré por tu tierra: no nos apartaremos por los labrados, ni por las viñas; no beberemos las aguas de los pozos: por el camino real iremos, hasta que pasemos tu término.
23Mas Sehón no dejó pasar á Israel por su término: antes juntó Sehón todo su pueblo, y salió contra Israel en el desierto: y vino á Jahaz, y peleó contra Israel.
24E hirióle Israel á filo de espada, y tomó su tierra desde Arnón hasta Jaboc, hasta los hijos de Ammón: porque el término de los hijos de Ammón era fuerte.
25Y tomó Israel todas estas ciudades: y habitó Israel en todas las ciudades del Amorrheo, en Hesbón y en todas sus aldeas.
26Porque Hesbón era la ciudad de Sehón, rey de los Amorrheos; el cual había tenido guerra antes con el rey de Moab, y tomado de su poder toda su tierra hasta Arnón.
27Por tanto, dicen los proverbistas: Venid á Hesbón, Edifíquese y repárese la ciudad de Sehón:
28Que fuego salió de Hesbón, Y llama de la ciudad de Sehón, Y consumió á Ar de Moab, A los señores de los altos de Arnón.
29Ay de ti, Moab Perecido has, pueblo de Chêmos: Puso sus hijos en huída, Y sus hijas en cautividad, Por Sehón rey de los Amorrheos.
30Mas devastamos el reino de ellos; pereció Hesbón hasta Dibón, Y destruimos hasta Nopha y Medeba.
31Así habitó Israel en la tierra del Amorrheo.
32Y envió Moisés á reconocer á Jazer; y tomaron sus aldeas, y echaron al Amorrheo que estaba allí.
33Y volvieron, y subieron camino de Basán, y salió contra ellos Og rey de Basán, él y todo su pueblo, para pelear en Edrei.
34Entonces Jehová dijo á Moisés: No le tengas miedo, que en tu mano lo he dado, á el y á todo su pueblo, y á su tierra; y harás de él como hiciste de Sehón, rey de los Amorrheos, que habitaba en Hesbón.
35E hirieron á él, y á sus hijos, y á toda su gente, sin que le quedara uno, y poseyeron su tierra. (Nm. 21:3,21‑35)
Jos. 10:10‑43• 10Y Jehová los turbó delante de Israel, é hiriólos con gran mortandad en Gabaón: y siguiólos por el camino que sube á Beth-oron, é hiriólos hasta Azeca y Maceda.
11Y como iban huyendo de los Israelitas, á la bajada de Beth-oron, Jehová echó sobre ellos del cielo grandes piedras hasta Azeca, y murieron: muchos más murieron de las piedras del granizo, que los que los hijos de Israel habían muerto á cuchillo.
12Entonces Josué habló á Jehová el día que Jehová entregó al Amorrheo delante de los hijos de Israel, y dijo en presencia de los Israelitas: Sol, detente en Gabaón; Y tú, Luna, en el valle de Ajalón.
13Y el sol se detuvo y la luna se paró, Hasta tanto que la gente se hubo vengado de sus enemigos. ¿No está aquesto escrito en el libro de Jasher? Y el sol se paró en medio del cielo, y no se apresuró á ponerse casi un día entero.
14Y nunca fué tal día antes ni después de aquél, habiendo atendido Jehová á la voz de un hombre: porque Jehová peleaba por Israel.
15Y Josué, y todo Israel con él, volvíase al campo en Gilgal.
16Pero los cinco reyes huyeron, y se escondieron en una cueva en Maceda.
17Y fué dicho á Josué que los cinco reyes habían sido hallados en una cueva en Maceda.
18Entonces Josué dijo: Rodad grandes piedras á la boca de la cueva, y poned hombres junto á ella que los guarden;
19Y vosotros no os paréis, sino seguid á vuestros enemigos, y heridles la retaguardia, sin dejarles entrar en sus ciudades; porque Jehová vuestro Dios los ha entregado en vuestra mano.
20Y aconteció que como Josué y los hijos de Israel hubieron acabado de herirlos con mortandad muy grande, hasta destruirlos, los que quedaron de ellos se metieron en las ciudades fuertes.
21Y todo el pueblo se volvió salvo al campo á Josué en Maceda; que no hubo quien moviese su lengua contra los hijos de Israel.
22Entonces dijo Josué: Abrid la boca de la cueva, y sacadme de ella á estos cinco reyes.
23E hiciéronlo así, y sacáronle de la cueva aquellos cinco reyes: al rey de Jerusalem, al rey de Hebrón, al rey de Jerimoth, al rey de Lachîs, al rey de Eglón.
24Y cuando hubieron sacado estos reyes á Josué, llamó Josué á todos los varones de Israel, y dijo á los principales de la gente de guerra que habían venido con él: Llegad y poned vuestros pies sobre los pescuezos de aquestos reyes. Y ellos se llegaron, y pusieron sus pies sobre los pescuezos de ellos.
25Y Josué les dijo: No temáis, ni os atemoricéis; sed fuertes y valientes: porque así hará Jehová á todos vuestros enemigos contra los cuales peleáis.
26Y después de esto Josué los hirió y los mató, é hízolos colgar en cinco maderos: y quedaron colgados en los maderos hasta la tarde.
27Y cuando el sol se iba á poner, mandó Josué que los quitasen de los maderos, y los echasen en la cueva donde se habían escondido: y pusieron grandes piedras á la boca de la cueva, hasta hoy.
28En aquel mismo día tomó Josué á Maceda, y la puso á cuchillo, y mató á su rey; á ellos y á todo lo que en ella tenía vida, sin quedar nada: mas al rey de Maceda hizo como había hecho al rey de Jericó.
29Y de Maceda pasó Josué, y todo Israel con él, á Libna; y peleó contra Libna:
30Y Jehová la entregó también á ella, y á su rey, en manos de Israel; y metióla á filo de espada, con todo lo que en ella había vivo, sin quedar nada: mas á su rey hizo de la manera que había hecho al rey de Jericó.
31Y Josué, y todo Israel con él, pasó de Libna á Lachîs, y puso campo contra ella, y combatióla:
32Y Jehová entregó á Lachîs en mano de Israel, y tomóla al día siguiente, y metióla á cuchillo, con todo lo que en ella había vivo, como había hecho en Libna.
33Entonces Horam, rey de Gezer, subió en ayuda de Lachîs; mas á él y á su pueblo hirió Josué, hasta no quedar ninguno de ellos.
34De Lachîs pasó Josué, y todo Israel con él, á Eglón: y pusieron campo contra ella, y combatiéronla:
35Y la tomaron el mismo día, y metiéronla á cuchillo; y aquel día mató á todo lo que en ella había vivo, como había hecho en Lachîs.
36Subió luego Josué, y todo Israel con él, de Eglón á Hebrón, y combatiéronla;
37Y tomándola, la metieron á cuchillo, á su rey y á todas su ciudades, con todo lo que en ella había vivo, sin quedar nada: como habían hecho á Eglón, así la destruyeron con todo lo que en ella había vivo.
38Y volviéndose Josué, y todo Israel con él, sobre Debir, combatióla;
39Y tomóla, y á su rey, y á todas sus villas; y metiéronlos á cuchillo, y destruyeron todo lo que allí dentro había vivo, sin quedar nada; como había hecho á Hebrón, así hizo á Debir y á su rey; y como había hecho á Libna y á su rey.
40Hirió pues Josué toda la región de las montañas, y del mediodía, y de los llanos, y de las cuestas, y á todos sus reyes, sin quedar nada; todo lo que tenía vida mató, al modo que Jehová Dios de Israel lo había mandado.
41E hiriólos Josué desde Cades-barnea hasta Gaza, y toda la tierra de Gosén hasta Gabaón.
42Todos estos reyes y sus tierras tomó Josué de una vez; porque Jehová el Dios de Israel peleaba por Israel.
43Y tornóse Josué, y todo Israel con él, al campo en Gilgal. (Jos. 10:10‑43)
Jos. 12:1‑24• 1Éstos son los reyes de la tierra que los hijos de Israel hirieron, y cuya tierra poseyeron de la otra parte del Jordán al nacimiento del sol, desde el arroyo de Arnón hasta el monte Hermón, y toda la llanura oriental:
2Sehón rey de los Amorrheos, que habitaba en Hesbón, y señoreaba desde Aroer, que está á la ribera del arroyo de Arnón, y desde en medio del arroyo, y la mitad de Galaad, hasta el arroyo Jaboc, el término de los hijos de Ammón;
3Y desde la campiña hasta la mar de Cinneroth, al oriente; y hasta la mar de la llanura, el mar Salado, al oriente, por el camino de Beth-jesimoth; y desde el mediodía debajo de las vertientes del Pisga.
4Y los términos de Og rey de Basán, que había quedado de los Rapheos, el cual habitaba en Astaroth y en Edrei,
5Y señoreaba en el monte de Hermón, y en Salca, y en todo Basán hasta los términos de Gessuri y de Maachâti, y la mitad de Galaad, término de Sehón rey de Hesbón.
6A estos hirieron Moisés siervo de Jehová y los hijos de Israel; y Moisés siervo de Jehová dió aquella tierra en posesión á los Rubenitas, Gaditas, y á la media tribu de Manasés.
7Y estos son los reyes de la tierra que hirió Josué con los hijos de Israel, de esta parte del Jordán al occidente, desde Baal-gad en el llano del Líbano hasta el monte de Halac que sube á Seir; la cual tierra dió Josué en posesión á las tribus de Israel, conforme á sus repartimientos;
8En montes y en valles, en llanos y en vertientes, al desierto y al mediodía; el Hetheo, y el Amorrheo, y el Cananeo, y el Pherezeo, y el Heveo, y el Jebuseo.
9El rey de Jericó, uno: el rey de Hai, que está al lado de Beth-el, otro:
10El rey de Jerusalem, otro: el rey de Hebrón, otro:
11El rey de Jarmuth, otro: el rey de Lachîs, otro:
12El rey de Eglón, otro: el rey de Gezer, otro:
13El rey de Debir, otro: el rey de Geder, otro:
14El rey de Horma, otro: el rey de Arad, otro:
15El rey de Libna, otro: el rey de Adullam, otro:
16El rey de Maceda, otro: el rey de Beth-el, otro:
17El rey de Tappua, otro: el rey de Hepher, otro:
18El rey de Aphec, otro: el rey de Lasarón, otro:
19El rey de Madón, otro: el rey de Hasor, otro:
20El rey de Simrom-meron, otro: el rey de Achsaph, otro:
21El rey de Taanach, otro: el rey de Megiddo, otro:
22El rey de Chêdes, otro: el rey de Jocneam de Carmel, otro:
23El rey de Dor, de la provincia de Dor, otro; el rey de Gentes en Gilgal, otro:
24El rey de Tirsa, otro: treinta y un reyes en todo. (Jos. 12:1‑24)
Ap. 19:14‑21• 14Y los ejércitos que están en el cielo le seguían en caballos blancos, vestidos de lino finísimo, blanco y limpio.
15Y de su boca sale una espada aguda, para herir con ella las gentes: y él los regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor, y de la ira del Dios Todopoderoso.
16Y en su vestidura y en su muslo tiene escrito este nombre: REY DEREYES Y SEÑOR DE SEÑORES.
17Y vi un ángel que estaba en el sol, y clamó con gran voz, diciendo á todas las aves que volaban por medio del cielo: Venid, y congregaos á la cena del gran Dios,
18Para que comáis carnes de reyes, y de capitanes, y carnes de fuertes, y carnes de caballos, y de los que están sentados sobre ellos; y carnes de todos, libres y siervos, de pequeños y de grandes
19Y vi la bestia, y los reyes de la tierra y sus ejércitos, congregados para hacer guerra contra el que estaba sentado sobre el caballo, y contra su ejército.
20Y la bestia fué presa, y con ella el falso profeta que había hecho las señales delante de ella, con las cuales había engañado á los que tomaron la señal de la bestia, y habían adorado su imagen. Estos dos fueron lanzados vivos dentro de un lago de fuego ardiendo en azufre.
21Y los otros fueron muertos con la espada que salía de la boca del que estaba sentado sobre el caballo, y todas las aves fueron hartas de las carnes de ellos. (Ap. 19:14‑21)