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Matthew 25

Mt. 25:16 KJV (With Strong’s)

+
16
Then
ho (Greek #3588)
the definite article; the (sometimes to be supplied, at others omitted, in English idiom)
KJV usage: the, this, that, one, he, she, it, etc.
Pronounce: ho
Origin: ἡ (hay), and the neuter τό (to) in all their inflections
de (Greek #1161)
but, and, etc.
KJV usage: also, and, but, moreover, now (often unexpressed in English).
Pronounce: deh
Origin: a primary particle (adversative or continuative)
he that had received
lambano (Greek #2983)
to take (in very many applications, literally and figuratively (properly objective or active, to get hold of; whereas 1209 is rather subjective or passive, to have offered to one; while 138 is more violent, to seize or remove))
KJV usage: accept, + be amazed, assay, attain, bring, X when I call, catch, come on (X unto), + forget, have, hold, obtain, receive (X after), take (away, up).
Pronounce: lam-ban'-o
Origin: a prolonged form of a primary verb, which is use only as an alternate in certain tenses
the five
pente (Greek #4002)
"five"
KJV usage: five.
Pronounce: pen'-teh
Origin: a primary number
talents
talanton (Greek #5007)
a balance (as supporting weights), i.e. (by implication) a certain weight (and thence a coin or rather sum of money) or "talent"
KJV usage: talent.
Pronounce: tal'-an-ton
Origin: neuter of a presumed derivative of the original form of τλάω (to bear; equivalent to 5342)
went
poreuomai (Greek #4198)
middle voice from a derivative of the same as 3984; to traverse, i.e. travel (literally or figuratively; especially to remove (figuratively, die), live, etc.); --depart, go (away, forth, one's way, up), (make a, take a) journey, walk.
Pronounce: por-yoo'-om-ahee
and traded
ergazomai (Greek #2038)
to toil (as a task, occupation, etc.), (by implication) effect, be engaged in or with, etc.
KJV usage: commit, do, labor for, minister about, trade (by), work.
Pronounce: er-gad'-zom-ahee
Origin: middle voice from 2041
with
en (Greek #1722)
"in," at, (up-)on, by, etc.
KJV usage: about, after, against, + almost, X altogether, among, X as, at, before, between, (here-)by (+ all means), for (... sake of), + give self wholly to, (here-)in(-to, -wardly), X mightily, (because) of, (up-)on, (open-)ly, X outwardly, one, X quickly, X shortly, (speedi-)ly, X that, X there(-in, -on), through(-out), (un-)to(-ward), under, when, where(-with), while, with(-in). Often used in compounds, with substantially the same import; rarely with verbs of motion, and then not to indicate direction, except (elliptically) by a separate (and different) preposition.
Pronounce: en
Origin: a primary preposition denoting (fixed) position (in place, time or state), and (by implication) instrumentality (medially or constructively), i.e. a relation of rest (intermediate between 1519 and 1537)
the same
autos (Greek #846)
the reflexive pronoun self, used (alone or in the comparative 1438) of the third person , and (with the proper personal pronoun) of the other persons
KJV usage: her, it(-self), one, the other, (mine) own, said, (self-), the) same, ((him-, my-, thy- )self, (your-)selves, she, that, their(-s), them(-selves), there(-at, - by, -in, -into, -of, -on, -with), they, (these) things, this (man), those, together, very, which. Compare 848.
Pronounce: ow-tos'
Origin: from the particle αὖ (perhaps akin to the base of 109 through the idea of a baffling wind) (backward)
, and
kai (Greek #2532)
and, also, even, so then, too, etc.; often used in connection (or composition) with other particles or small words
KJV usage: and, also, both, but, even, for, if, or, so, that, then, therefore, when, yet.
Pronounce: kahee
Origin: apparently, a primary particle, having a copulative and sometimes also a cumulative force
made
poieo (Greek #4160)
to make or do (in a very wide application, more or less direct)
KJV usage: abide, + agree, appoint, X avenge, + band together, be, bear, + bewray, bring (forth), cast out, cause, commit, + content, continue, deal, + without any delay, (would) do(-ing), execute, exercise, fulfil, gain, give, have, hold, X journeying, keep, + lay wait, + lighten the ship, make, X mean, + none of these things move me, observe, ordain, perform, provide, + have purged, purpose, put, + raising up, X secure, shew, X shoot out, spend, take, tarry, + transgress the law, work, yield. Compare 4238.
Pronounce: poy-eh'-o
Origin: apparently a prolonged form of an obsolete primary
them other
allos (Greek #243)
"else," i.e. different (in many applications)
KJV usage: more, one (another), (an-, some an-)other(-s, -wise).
Pronounce: al'-los
Origin: a primary word
five
pente (Greek #4002)
"five"
KJV usage: five.
Pronounce: pen'-teh
Origin: a primary number
talents
talanton (Greek #5007)
a balance (as supporting weights), i.e. (by implication) a certain weight (and thence a coin or rather sum of money) or "talent"
KJV usage: talent.
Pronounce: tal'-an-ton
Origin: neuter of a presumed derivative of the original form of τλάω (to bear; equivalent to 5342)
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Cross References

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went.
2 S. 7:1‑3• 1Y aconteció que, estando ya el rey asentado en su casa, después que Jehová le había dado reposo de todos sus enemigos en derredor,
2Dijo el rey al profeta Nathán: Mira ahora, yo moro en edificios de cedro, y el arca de Dios está entre cortinas.
3Y Nathán dijo al rey: Anda, y haz todo lo que está en tu corazón, que Jehová es contigo.
(2 S. 7:1‑3)
;
1 Cr. 13:1‑3• 1Entonces David tomó consejo con los capitanes de millares y de cientos, y con todos los jefes.
2Y dijo David á todo el congreso de Israel: Si os parece bien y de Jehová nuestro Dios, enviaremos á todas partes á llamar nuestros hermanos que han quedado en todas las tierras de Israel, y á los sacerdotes y Levitas que están con ellos en sus ciudades y ejidos que se junten con nosotros;
3Y traigamos el arca de nuestro Dios á nosotros, porque desde el tiempo de Saúl no hemos hecho caso de ella.
(1 Cr. 13:1‑3)
;
1 Cr. 22:1‑26:32• 1Y dijo David: Esta es la casa de Jehová Dios, y este es el altar del holocausto para Israel.
2Después mandó David que se juntasen los extranjeros que estaban en la tierra de Israel, y señaló de ellos canteros que labrasen piedras para edificar la casa de Dios.
3Asimismo aparejó David mucho hierro para la clavazón de las puertas, y para las junturas; y mucho metal sin peso, y madera de cedro sin cuenta.
4Porque los Sidonios y Tirios habían traído á David madera de cedro innumerable.
5Y dijo David: Salomón mi hijo es muchacho y tierno, y la casa que se ha de edificar á Jehová ha de ser magnífica por excelencia, para nombre y honra en todas las tierras; ahora pues yo le aparejaré lo necesario. Y preparó David antes de su muerte en grande abundancia.
6Llamó entonces David á Salomón su hijo, y mandóle que edificase casa á Jehová Dios de Israel.
7Y dijo David á Salomón: Hijo mío, en mi corazón tuve el edificar templo al nombre de Jehová mi Dios.
8Mas vino á mí palabra de Jehová, diciendo: Tú has derramado mucha sangre, y has traído grandes guerras: no edificarás casa á mi nombre, porque has derramado mucha sangre en la tierra delante de mí:
9He aquí, un hijo te nacerá, el cual será varón de reposo, porque yo le daré quietud de todos sus enemigos en derredor; por tanto su nombre será Salomón; y yo daré paz y reposo sobre Israel en sus días:
10El edificará casa á mi nombre, y él me será á mí por hijo, y yo le seré por padre; y afirmaré el trono de su reino sobre Israel para siempre.
11Ahora pues, hijo mío, sea contigo Jehová, y seas prosperado, y edifiques casa á Jehová tu Dios, como él ha dicho de ti.
12Y Jehová te dé entendimiento y prudencia, y él te dé mandamientos para Israel; y que tú guardes la ley de Jehová tu Dios.
13Entonces serás prosperado, si cuidares de poner por obra los estatutos y derechos que Jehová mandó á Moisés para Israel. Esfuérzate pues, y cobra ánimo; no temas, ni desmayes.
14He aquí, yo en mi estrechez he prevenido para la casa de Jehová cien mil talentos de oro, y un millar de millares de talentos de plata: no tiene peso el metal ni el hierro, porque es mucho. Asimismo he aprestado madera y piedra, á lo cual tú añadirás.
15Tú tienes contigo muchos oficiales, canteros, albañiles, y carpinteros, y todo hombre experto en toda obra.
16Del oro, de la plata, del metal, y del hierro, no hay número. Levántate pues, y á la obra; que Jehová será contigo.
17Asimismo mandó David á todos los principales de Israel que diesen ayuda á Salomón su hijo, diciendo:
18¿No es con vosotros Jehová vuestro Dios, el cual os ha dado quietud de todas partes? porque él ha entregado en mi mano los moradores de la tierra, y la tierra ha sido sujetada delante de Jehová, y delante de su pueblo.
19Poned, pues, ahora vuestros corazones y vuestros ánimos en buscar á Jehová vuestro Dios; y levantaos, y edificad el santuario del Dios Jehová, para traer el arca del pacto de Jehová, y lo santos vasos de Dios, á la casa edificada al nombre de Jehová.
1Siendo pues David ya viejo y harto de días, hizo á Salomón su hijo rey sobre Israel.
2Y juntando á todos los principales de Israel, y á los sacerdotes y Levitas,
3Fueron contados los Levitas de treinta años arriba; y fué el número de ellos por sus cabezas, contados uno á uno, treinta y ocho mil.
4De éstos, veinticuatro mil para dar prisa á la obra de la casa de Jehová; y gobernadores y jueces, seis mil;
5Además cuatro mil porteros; y cuatro mil para alabar á Jehová, dijo David, con los instrumentos que he hecho para rendir alabanzas.
6Y repartiólos David en órdenes conforme á los hijos de Leví, Gersón y Coath y Merari.
7Los hijos de Gersón: Ladán, y Simi.
8Los hijos de Ladán, tres: Jehiel el primero, después Zetham y Joel.
9Los hijos de Simi, tres: Selomith, Haziel, y Arán. Estos fueron los príncipes de las familias de Ladán.
10Y los hijos de Simi: Jahath, Zinat, Jeus, y Berías. Estos cuatro fueron los hijos de Simi.
11Jahat era el primero, Zinat el segundo; mas Jeus y Berías no multiplicaron en hijos, por lo cual fueron contados por una familia.
12Los hijos de Coath: Amram, Ishar, Hebrón, y Uzziel, ellos cuatro.
13Los hijos de Amram: Aarón y Moisés. Y Aarón fué apartado para ser dedicado á las más santas cosas, él y sus hijos para siempre, para que quemasen perfumes delante de Jehová, y le ministrasen, y bendijesen en su nombre, para siempre.
14Y los hijos de Moisés, varón de Dios, fueron contados en la tribu de Leví.
15Los hijos de Moisés fueron Gersón y Eliezer.
16Hijo de Gersón fué Sebuel el primero.
17E hijo de Eliezer fué Rehabía el primero. Y Eliezer no tuvo otros hijos; mas los hijos de Rehabía fueron muchos.
18Hijo de Ishar fué Selomith el primero.
19Los hijos de Hebrón: Jería el primero, Amarías el segundo, Jahaziel el tercero, y Jecamán el cuarto.
20Los hijos de Uzziel: Michâ el primero, é Isía el segundo.
21Los hijos de Merari: Mahali y Musi. Los hijos de Mahali: Eleazar y Cis.
22Y murió Eleazar sin hijos, mas tuvo hijas; y los hijos de Cis, sus hermanos, las tomaron por mujeres.
23Los hijos de Musi: Mahali, Eder y Jerimoth, ellos tres.
24Estos son los hijos de Leví en las familias de sus padres, cabeceras de familias en sus delineaciones, contados por sus nombres, por sus cabezas, los cuales hacían obra en el ministerio de la casa de Jehová, de veinte años arriba.
25Porque David dijo: Jehová Dios de Israel ha dado reposo á su pueblo Israel, y el habitar en Jerusalem para siempre.
26Y también los Levitas no llevarán más el tabernáculo, y todos sus vasos para su ministerio.
27Así que, conforme á las postreras palabras de David, fué la cuenta de los hijos de Leví de veinte años arriba.
28Y estaban bajo la mano de los hijos de Aarón, para ministrar en la casa de Jehová, en los atrios y en las cámaras, y en la purificación de toda cosa santificada, y en la demás obra del ministerio de la casa de Dios;
29Asimismo para los panes de la proposición, y para la flor de la harina para el sacrificio, y para las hojuelas sin levadura, y para la fruta de sartén, y para lo tostado, y para toda medida y cuenta;
30Y para que asistiesen cada mañana todos los días á confesar y alabar á Jehová, y asimismo á la tarde;
31Y para ofrecer todos los holocaustos á Jehová los sábados, nuevas lunas, y solemnidades, por la cuenta y forma que tenían, continuamente delante de Jehová.
32Y para que tuviesen la guarda del tabernáculo del testimonio, y la guarda del santuario, y las órdenes de los hijos de Aarón sus hermanos, en el ministerio de la casa de Jehová.
1También los hijos de Aarón tuvieron sus repartimientos. Los hijos de Aarón: Nadab, Abiú, Eleazar é Ithamar.
2Mas Nadab, y Abiú murieron antes que su padre, y no tuvieron hijos: Eleazar é Ithamar tuvieron el sacerdocio.
3Y David los repartió, siendo Sadoc de los hijos de Eleazar, y Ahimelech de los hijos de Ithamar, por sus turnos en su ministerio.
4Y los hijos de Eleazar fueron hallados, cuanto á sus principales varones, muchos más que los hijos de Ithamar; y repartiéronlos así: De los hijos de Eleazar había dieciséis cabezas de familias paternas; y de los hijos de Ithamar por las familias de sus padres, ocho.
5Repartiéronlos pues por suerte los unos con los otros: porque de los hijos de Eleazar y de los hijos de Ithamar hubo príncipes del santuario, y príncipes de la casa de Dios.
6Y Semeías escriba, hijo de Nathanael, de los Levitas, escribiólos delante del rey y de los príncipes, y delante de Sadoc el sacerdote, y de Ahimelech hijo de Abiathar, y de los príncipes de las familias de los sacerdotes y Levitas: y adscribían una familia á Eleazar, y á Ithamar otra.
7Y la primera suerte salió por Joiarib, la segunda por Jedaía;
8La tercera por Harim, la cuarta por Seorim;
9La quinta por Malchîas, la sexta por Miamim;
10La séptima por Cos, la octava por Abías;
11La nona por Jesua, la décima por Sechânía;
12La undécima por Eliasib, la duodécima por Jacim;
13La décimatercia por Uppa, la décimacuarta por Isebeab;
14La décimaquinta por Bilga, la décimasexta por Immer;
15La décimaséptima por Hezir, la décimaoctava por Aphses;
16La décimanona por Pethaía, la vigésima por Hezeciel;
17La vigésimaprima por Jachim, la vigésimasegunda por Hamul;
18La vigésimatercia por Delaía, la vigésimacuarta por Maazía.
19Estos fueron contados en su ministerio, para que entrasen en la casa de Jehová, conforme á su ordenanza, bajo el mando de Aarón su padre, de la manera que le había mandado Jehová el Dios de Israel.
20Y de los hijos de Leví que quedaron: Subael, de los hijos de Amram; y de los hijos de Subael, Jehedías.
21Y de los hijos de Rehabía, Isias el principal.
22De los Ishareos, Selemoth; é hijo de Selemoth, Jath.
23Y de los hijos de Hebrón; Jeria el primero, el segundo Amarías, el tercero Jahaziel, el cuarto Jecamán.
24Hijo de Uzziel, Michâ; é hijo de Michâ, Samir.
25Hermano de Michâ, Isía; é hijo de Isía, Zachârías.
26Los hijos de Merari: Mahali y Musi; hijo de Jaazia, Benno.
27Los hijos de Merari por Jaazia: Benno, y Soam, Zachûr é Ibri.
28Y de Mahali, Eleazar, el cual no tuvo hijos.
29Hijo de Cis, Jerameel.
30Los hijos de Musi: Maheli, Eder y Jerimoth. Estos fueron los hijos de los Levitas conforme á las casas de sus familias.
31Estos también echaron suertes, como sus hermanos los hijos de Aarón, delante del rey David, y de Sadoc y de Ahimelech, y de los príncipes de las familias de los sacerdotes y Levitas: el principal de los padres igualmente que el menor de sus hermanos.
1Asimismo David y los príncipes del ejército apartaron para el ministerio á los hijos de Asaph, y de Hemán, y de Jeduthún, los cuales profetizasen con arpas, salterios, y címbalos: y el número de ellos fué, de hombres idóneos para la obra de su ministerio respectivo:
2De los hijos de Asaph: Zachûr, José, Methanías, y Asareela, hijos de Asaph, bajo la dirección de Asaph, el cual profetizaba á la orden del rey.
3De Jeduthún: los hijos de Jeduthún, Gedalías, Sesi, Jesaías, Hasabías, y Mathithías, y Simi: seis, bajo la mano de su padre Jeduthún, el cual profetizaba con arpa, para celebrar y alabar á Jehová.
4De Hemán: los hijos de Hemán, Buccia, Mathanía, Uzziel, Sebuel, Jerimoth, Hananías, Hanani, Eliatha, Gidalthi, Romamti-ezer, Josbecasa, Mallothi, Othir, y Mahazioth.
5Todos estos fueron hijos de Hemán, vidente del rey en palabras de Dios, para ensalzar el poder suyo: y dió Dios á Hemán catorce hijos y tres hijas.
6Y todos estos estaban bajo la dirección de su padre en la música, en la casa de Jehová, con címbalos, salterios y arpas, para el ministerio del templo de Dios, por disposición del rey acerca de Asaph, de Jeduthún, y de Hemán.
7Y el número de ellos con sus hermanos instruídos en música de Jehová, todos los aptos, fué doscientos ochenta y ocho.
8Y echaron suertes para los turnos del servicio, entrando el pequeño con el grande, lo mismo el maestro que el discípulo.
9Y la primera suerte salió por Asaph, á José: la segunda á Gedalías, quien con sus hermanos é hijos fueron doce;
10La tercera á Zachûr, con sus hijos y sus hermanos, doce;
11La cuarta á Isri, con sus hijos y sus hermanos, doce;
12La quinta á Nethanías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
13La sexta á Buccia, con sus hijos y sus hermanos, doce;
14La séptima á Jesarela, con sus hijos y sus hermanos, doce;
15La octava á Jesahías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
16La nona á Mathanías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
17La décima á Simi, con sus hijos y sus hermanos, doce;
18La undécima á Azareel, con sus hijos y sus hermanos, doce;
19La duodécima á Hasabías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
20La décimatercia á Subael, con sus hijos y sus hermanos, doce;
21La décimacuarta á Mathithías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
22La décimaquinta á Jerimoth, con sus hijos y sus hermanos, doce;
23La décimasexta á Hananías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
24La décimaséptima á Josbecasa, con sus hijos y sus hermanos, doce;
25La décimaoctava á Hanani, con sus hijos y sus hermanos, doce;
26La décimanona á Mallothi, con sus hijos y sus hermanos, doce;
27La vigésima á Eliatha, con sus hijos y sus hermanos, doce;
28La vigésimaprima á Othir, con sus hijos y sus hermanos, doce;
29La vigésimasegunda á Giddalthi, con sus hijos y sus hermanos, doce;
30La vigésimatercia á Mahazioth, con sus hijos y sus hermanos, doce;
31La vigésimacuarta á Romamti-ezer, con sus hijos y sus hermanos, doce.
1Cuanto á los repartimientos de los porteros: De los Coraitas: Meselemia hijo de Coré, de los hijos de Asaph.
2Los hijos de Meselemia: Zachârías el primogénito, Jediael el segundo, Zebadías el tercero, Jatnael el cuarto;
3Elam el quinto, Johanam el sexto, Elioenai el séptimo.
4Los hijos de Obed-edom: Semeías el primogénito, Jozabad el segundo, Joab el tercero, el cuarto Sachâr, el quinto Nathanael;
5El sexto Anmiel, el séptimo Issachâr, el octavo Peullethai: porque Dios había bendecido á Obed-edom.
6También de Semeías su hijo nacieron hijos que fueron señores sobre la casa de sus padres; porque eran varones muy valerosos.
7Los hijos de Semeías: Othni, Raphael, Obed, Elzabad, y sus hermanos, hombres esforzados; asimismo Eliú, y Samachîas.
8Todos estos de los hijos de Obed-edom: ellos con sus hijos y sus hermanos, hombres robustos y fuertes para el ministerio; sesenta y dos, de Obed-edom.
9Y los hijos de Meselemia y sus hermanos, dieciocho hombres valientes.
10De Hosa, de los hijos de Merari: Simri el principal, (aunque no era el primogénito, mas su padre lo puso para que fuese cabeza;)
11El segundo Hilcías, el tercero Tebelías, el cuarto Zachârías: todos los hijos de Hosa y sus hermanos fueron trece.
12Entre estos se hizo la distribución de los porteros, alternando los principales de los varones en la guardia con sus hermanos, para servir en la casa de Jehová.
13Y echaron suertes, el pequeño con el grande, por las casas de sus padres, para cada puerta.
14Y cayó la suerte al oriente á Selemía. Y á Zachârías su hijo, consejero entendido, metieron en las suertes: y salió la suerte suya al norte.
15Y por Obed-edom, al mediodía; y por sus hijos, la casa de la consulta.
16Por Suppim y Hosa al occidente, con la puerta de Sallechêt al camino de la subida, guardia contra guardia.
17Al oriente seis Levitas, al norte cuatro de día; al mediodía cuatro de día; y á la casa de la consulta, de dos en dos.
18En la cámara de los vasos al occidente, cuatro al camino, y dos en la cámara.
19Estos son los repartimientos de los porteros, hijos de los Coraitas, y de los hijos de Merari.
20Y de los Levitas, Achîas tenía cargo de los tesoros de la casa de Dios, y de los tesoros de las cosas santificadas.
21Cuanto á los hijos de Ladán, hijos de Gersón: de Ladán, los príncipes de las familias de Ladán fueron Gersón, y Jehieli.
22Los hijos de Jehieli, Zethán y Joel su hermano, tuvieron cargo de los tesoros de la casa de Jehová.
23Acerca de los Amramitas, de los Isharitas, de los Hebronitas, y de los Uzzielitas,
24Sebuel hijo de Gersón, hijo de Moisés, era principal sobre los tesoros.
25En orden á su hermano Eliezer, hijo de éste era Rehabía, hijo de éste Isaías, hijo de éste Joram, hijo de éste Zichri, del que fué hijo Selomith.
26Este Selomith y sus hermanos tenían cargo de todos los tesoros de todas las cosas santificadas, que había consagrado el rey David, y los príncipes de las familias, y los capitanes de millares y de cientos, y los jefes del ejército;
27De lo que habían consagrado de las guerras y de los despojos, para reparar la casa de Jehová.
28Asimismo todas las cosas que había consagrado Samuel vidente, y Saúl hijo de Cis, y Abner hijo de Ner, y Joab hijo de Sarvia: y todo lo que cualquiera consagraba, estaba bajo la mano de Selomith y de sus hermanos.
29De los Isharitas, Chenanía y sus hijos eran gobernadores y jueces sobre Israel en las obras de fuera.
30De los Hebronitas, Hasabías y sus hermanos, hombres de vigor, mil y setecientos, gobernaban á Israel de la otra parte del Jordán, al occidente, en toda la obra de Jehová, y en el servicio del rey.
31De los Hebronitas, Jerías era el principal entre los Hebronitas repartidos en sus linajes por sus familias. En el año cuarenta del reinado de David se registraron, y halláronse entre ellos fuertes y vigorosos en Jazer de Galaad.
32Y sus hermanos, hombres valientes, eran dos mil y setecientos, cabezas de familias, los cuales el rey David constituyó sobre los Rubenitas, Gaditas, y sobre la media tribu de Manasés, para todas las cosas de Dios, y los negocios del rey.
(1 Cr. 22:1‑26:32)
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1 Cr. 28:2‑21• 2Y levantándose el rey David, puesto en pie dijo: Oidme, hermanos míos, y pueblo mío. Yo tenía en propósito edificar una casa, para que en ella reposara el arca del pacto de Jehová, y para el estrado de los pies de nuestro Dios; y había ya aprestado todo para edificar.
3Mas Dios me dijo: Tú no edificarás casa á mi nombre: porque eres hombre de guerra, y has derramado mucha sangre.
4Empero Jehová el Dios de Israel me eligió de toda la casa de mi padre, para que perpetuamente fuese rey sobre Israel: porque á Judá escogió por caudillo, y de la casa de Judá la familia de mi padre; y de entre los hijos de mi padre agradóse de mí para ponerme por rey sobre todo Israel;
5Y de todos mis hijos (porque Jehová me ha dado muchos hijos,) eligió á mi hijo Salomón para que se siente en el trono del reino de Jehová sobre Israel.
6Y me ha dicho: Salomón tu hijo, él edificará mi casa y mis atrios: porque á éste me he escogido por hijo, y yo le seré á él por padre.
7Asimismo yo confirmaré su reino para siempre, si él se esforzare á poner por obra mis mandamientos y mis juicios, como aqueste día.
8Ahora pues, delante de lo ojos de todo Israel, congregación de Jehová, y en oídos de nuestro Dios, guardad é inquirid todos los preceptos de Jehová vuestro Dios, para que poseáis la buena tierra, y la dejéis por heredad á vuestros hijos después de vosotros perpetuamente.
9Y tú, Salomón, hijo mío, conoce al Dios de tu padre, y sírvele con corazón perfecto, y con ánimo voluntario; porque Jehová escudriña los corazones de todos, y entiende toda imaginación de los pensamientos. Si tú le buscares, lo hallarás; mas si lo dejares, él te desechará para siempre.
10Mira, pues, ahora que Jehová te ha elegido para que edifiques casa para santuario: esfuérzate, y haz la.
11Y David dió á Salomón su hijo la traza del pórtico, y de sus casas, y de sus oficinas, y de sus salas, y de sus recámaras, y de la casa del propiciatorio.
12Asimismo la traza de todas las cosas que tenía en su voluntad, para los atrios de la casa de Jehová, y para todas las cámaras en derredor, para los tesoros de la casa de Dios, y para los tesoros de las cosas santificadas:
13También para los órdenes de los sacerdotes y de los Levitas, y para toda la obra del ministerio de la casa de Jehová, y para todos los vasos del ministerio de la casa de Jehová.
14Y dió oro por peso para lo de oro, para todos los vasos de cada servicio: y plata por peso para todos los vasos, para todos los vasos de cada servicio.
15Oro por peso para los candeleros de oro, y para sus candilejas; por peso el oro para cada candelero y sus candilejas: y para los candeleros de plata, plata por peso para el candelero y sus candilejas, conforme al servicio de cada candelero.
16Asimismo dió oro por peso para las mesas de la proposición, para cada mesa: del mismo modo plata para las mesas de plata:
17También oro puro para los garfios y para las palanganas, y para los incensarios, y para los tazones de oro, para cada tazón por peso; y para los tazones de plata, por peso para cada tazón:
18Además, oro puro por peso para el altar del perfume, y para el á manera de carro de los querubines de oro, que con las alas extendidas cubrían el arca del pacto de Jehová.
19Todas estas cosas, dijo David, se me han representado por la mano de Jehová que me hizo entender todas las obras del diseño.
20Dijo más David á Salomón su hijo: Anímate y esfuérzate, y ponlo por obra; no temas, ni desmayes, porque el Dios Jehová, mi Dios, será contigo: él no te dejará, ni te desamparará, hasta que acabes toda la obra para el servicio de la casa de Jehová.
21He aquí los órdenes de los sacerdotes y de los Levitas, para todo el ministerio de la casa de Dios, serán contigo en toda la obra: asimismo todos los voluntarios é inteligentes para cualquiera especie de industria; y los príncipes, y todo el pueblo para ejecutar todas tus órdenes.
(1 Cr. 28:2‑21)
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1 Cr. 29:1‑17• 1Después dijo el rey David á toda la asamblea: A solo Salomón mi hijo ha elegido Dios; él es joven y tierno, y la obra grande; porque la casa no es para hombre, sino para Jehová Dios.
2Yo empero con todas mis fuerzas he preparado para la casa de mi Dios, oro para las cosas de oro, y plata para las cosas de plata, y metal para las de metal, y hierro para las de hierro, y madera para las de madera, y piedras oniquinas, y piedras preciosas, y piedras negras, y piedras de diversos colores, y toda suerte de piedras preciosas, y piedras de mármol en abundancia.
3A más de esto, por cuanto tengo mi gusto en la casa de mi Dios, yo guardo en mi tesoro particular oro y plata que, además de todas las cosas que he aprestado para la casa del santuario, he dado para la casa de mi Dios;
4A saber, tres mil talentos de oro, de oro de Ophir, y siete mil talentos de plata afinada para cubrir las paredes de las casas:
5Oro pues para las cosas de oro, y plata para las cosas de plata, y para toda la obra de manos de los oficiales. ¿Y quién quiere hacer hoy ofrenda á Jehová?
6Entonces los príncipes de las familias, y los príncipes de las tribus de Israel, tribunos y centuriones, con los superintendentes de la hacienda del rey, ofrecieron de su voluntad;
7Y dieron para el servicio de la casa de Dios cinco mil talentos de oro y diez mil sueldos, y diez mil talentos de plata, y dieciocho mil talentos de metal, y cinco mil talentos de hierro.
8Y todo el que se halló con piedras preciosas, diólas para el tesoro de la casa de Jehová, en mano de Jehiel Gersonita.
9Y holgóse el pueblo de haber contribuído de su voluntad; porque con entero corazón ofrecieron á Jehová voluntariamente.
10Asimismo holgóse mucho el rey David, y bendijo á Jehová delante de toda la congregación; y dijo David: Bendito seas tú, oh Jehová, Dios de Israel nuestro padre, de uno á otro siglo.
11Tuya es, oh Jehová, la magnificencia, y el poder, y la gloria, la victoria, y el honor; porque todas las cosas que están en los cielos y en la tierra son tuyas. Tuyo, oh Jehová, es el reino, y la altura sobre todos los que están por cabeza.
12Las riquezas y la gloria están delante de ti, y tú señoreas á todos: y en tu mano está la potencia y la fortaleza, y en tu mano la grandeza y fuerza de todas las cosas.
13Ahora pues, Dios nuestro, nosotros te confesamos, y loamos tu glorioso nombre.
14Porque ¿quién soy yo, y quién es mi pueblo, para que pudiésemos ofrecer de nuestra voluntad cosas semejantes? porque todo es tuyo, y lo recibido de tu mano te damos.
15Porque nosotros, extranjeros y advenedizos somos delante de ti, como todos nuestros padres; y nuestros días cual sombra sobre la tierra, y no dan espera.
16Oh Jehová Dios nuestro, toda esta abundancia que hemos aprestado para edificar casa á tu santo nombre, de tu mano es, y todo es tuyo.
17Yo sé, Dios mío, que tú escudriñas los corazones, y que la rectitud te agrada: por eso yo con rectitud de mi corazón voluntariamente te he ofrecido todo esto, y ahora he visto con alegría que tu pueblo, que aquí se ha hallado ahora, ha dado para ti espontáneamente.
(1 Cr. 29:1‑17)
;
2 Cr. 1:9‑10• 9Confírmese pues ahora, oh Jehová Dios, tu palabra dada á David mi padre; porque tú me has puesto por rey sobre un pueblo en muchedumbre como el polvo de la tierra.
10Dame ahora sabiduría y ciencia, para salir y entrar delante de este pueblo: porque ¿quién podrá juzgar este tu pueblo tan grande?
(2 Cr. 1:9‑10)
;
2 Cr. 15:8‑15• 8Y como oyó Asa las palabras y profecía de Obed profeta, fué confortado, y quitó las abominaciones de toda la tierra de Judá y de Benjamín, y de las ciudades que él había tomado en el monte de Ephraim; y reparó el altar de Jehová que estaba delante del pórtico de Jehová.
9Después hizo juntar á todo Judá y Benjamín, y con ellos los extranjeros de Ephraim, y de Manasés, y de Simeón: porque muchos de Israel se habían pasado á él, viendo que Jehová su Dios era con él.
10Juntáronse pues en Jerusalem en el mes tercero del año décimoquinto del reinado de Asa.
11Y en aquel mismo día sacrificaron á Jehová, de los despojos que habían traído, setecientos bueyes y siete mil ovejas.
12Y entraron en concierto de que buscarían á Jehová el Dios de sus padres, de todo su corazón y de toda su alma;
13Y que cualquiera que no buscase á Jehová el Dios de Israel, muriese, grande ó pequeño, hombre ó mujer.
14Y juraron á Jehová con gran voz y júbilo, á son de trompetas y de bocinas:
15Del cual juramento todos los de Judá se alegraron; porque de todo su corazón lo juraban, y de toda su voluntad lo buscaban: y fué hallado de ellos; y dióles Jehová reposo de todas partes.
(2 Cr. 15:8‑15)
;
2 Cr. 17:3‑9• 3Y fué Jehová con Josaphat, porque anduvo en los primeros caminos de David su padre, y no buscó á los Baales;
4Sino que buscó al Dios de su padre, y anduvo en sus mandamientos, y no según las obras de Israel.
5Jehová por tanto confirmó el reino en su mano, y todo Judá dió á Josaphat presentes; y tuvo riquezas y gloria en abundancia.
6Y animóse su corazón en los caminos de Jehová, y quitó los altos y los bosques de Judá.
7Al tercer año de su reinado envió sus príncipes Ben-hail, Obdías, Zachârías, Nathaniel y Michêas, para que enseñasen en las ciudades de Judá;
8Y con ellos á los Levitas, Semeías, Nethanías, Zebadías, y Asael, y Semiramoth, y Jonathán, y Adonías, y Tobías, y Tobadonías, Levitas; y con ellos á Elisama y á Joram, sacerdotes.
9Y enseñaron en Judá, teniendo consigo el libro de la ley de Jehová, y rodearon por todas las ciudades de Judá enseñando al pueblo.
(2 Cr. 17:3‑9)
;
2 Cr. 19:4‑10• 4Habitó pues Josaphat en Jerusalem; mas daba vuelta y salía al pueblo, desde Beer-seba hasta el monte de Ephraim, y reducíalos á Jehová el Dios de sus padres.
5Y puso en la tierra jueces en todas las ciudades fuertes de Judá, por todos los lugares.
6Y dijo á los jueces: Mirad lo que hacéis: porque no juzguéis en lugar de hombre, sino en lugar de Jehová, el cual está con vosotros en el negocio del juicio.
7Sea pues con vosotros el temor de Jehová; guardad y haced: porque en Jehová nuestro Dios no hay iniquidad, ni acepción de personas, ni recibir cohecho.
8Y puso también Josaphat en Jerusalem algunos de los Levitas y sacerdotes, y de los padres de familias de Israel, para el juicio de Jehová y para las causas. Y volviéronse á Jerusalem.
9Y mandóles, diciendo: Procederéis asimismo con temor de Jehová, con verdad, y con corazón íntegro.
10En cualquier causa que viniere á vosotros de vuestros hermanos que habitan en las ciudades, entre sangre y sangre, entre ley y precepto, estatutos y derechos, habéis de amonestarles que no pequen contra Jehová, porque no venga ira sobre vosotros y sobre vuestros hermanos. Obrando así no pecaréis.
(2 Cr. 19:4‑10)
;
2 Cr. 31:20‑21• 20De esta manera hizo Ezechîas en todo Judá: y ejecutó lo bueno, recto, y verdadero, delante de Jehová su Dios.
21En todo cuanto comenzó en el servicio de la casa de Dios, y en la ley y mandamientos, buscó á su Dios, é hízolo de todo corazón, y fué prosperado.
(2 Cr. 31:20‑21)
;
2 Cr. 33:15‑16• 15Asimismo quitó los dioses ajenos, y el ídolo de la casa de Jehová, y todos los altares que había edificado en el monte de la casa de Jehová y en Jerusalem, y echólos fuera de la ciudad.
16Reparó luego el altar de Jehová, y sacrificó sobre él sacrificios pacíficos y de alabanza; y mandó á Judá que sirviesen á Jehová Dios de Israel.
(2 Cr. 33:15‑16)
;
2 Cr. 34:1‑35:27• 1De ocho años era Josías cuando comenzó á reinar, y treinta y un años reinó en Jerusalem.
2Este hizo lo recto en ojos de Jehová, y anduvo en los caminos de David su padre, sin apartarse á la diestra ni á la siniestra.
3A los ocho años de su reinado, siendo aún muchacho, comenzó á buscar al Dios de David su padre; y á los doce años comenzó á limpiar á Judá y á Jerusalem de los altos, bosques, esculturas, é imágenes de fundición.
4Y derribaron delante de él los altares de los Baales, é hizo pedazos las imágenes del sol, que estaban puestas encima; despedazó también los bosques, y las esculturas y estatuas de fundición, y desmenuzólas, y esparció el polvo sobre los sepulcros de los que las habían sacrificado.
5Quemó además los huesos de los sacerdotes sobre sus altares, y limpió á Judá y á Jerusalem.
6Lo mismo hizo en las ciudades de Manasés, Ephraim, y Simeón, hasta en Nephtalí, con sus lugares asolados alrededor.
7Y como hubo derribado los altares y los bosques, y quebrado y desmenuzado las esculturas, y destruído todos los ídolos por toda la tierra de Israel, volvióse á Jerusalem.
8A los dieciocho años de su reinado, después de haber limpiado la tierra, y la casa, envió á Saphán hijo de Asalías, y á Maasías gobernador de la ciudad, y á Joah hijo de Joachâz, canciller, para que reparasen la casa de Jehová su Dios.
9Los cuales vinieron á Hilcías, gran sacerdote, y dieron el dinero que había sido metido en la casa de Jehová, que los Levitas que guardaban la puerta habían recogido de mano de Manasés y de Ephraim y de todas las reliquias de Israel, y de todo Judá y Benjamín, habiéndose después vuelto á Jerusalem.
10Y entregáronlo en mano de los que hacían la obra, que eran sobrestantes en la casa de Jehová; los cuales lo daban á los que hacían la obra y trabajaban en la casa de Jehová, para reparar y restaurar el templo.
11Daban asimismo á los oficiales y albañiles para que comprasen piedra de cantería, y madera para las trabazones, y para entabladura de las casas, las cuales habían destruído los reyes de Judá.
12Y estos hombres procedían con fidelidad en la obra: y eran sus gobernadores Jahath y Abdías, Levitas de los hijos de Merari; y Zachârías y Mesullam de los hijos de Coath, para que activasen la obra; y de los Levitas, todos los entendidos en instrumentos de música.
13También velaban sobre los ganapanes, y eran sobrestantes de los que se ocupaban en cualquier clase de obra; y de los Levitas había esribas, gobernadores, y porteros.
14Y al sacar el dinero que había sido metido en la casa de Jehová, Hilcías el sacerdote halló el libro de la ley de Jehová dada por mano de Moisés.
15Y dando cuenta Hilcías, dijo á Saphán escriba: Yo he hallado el libro de la ley en la casa de Jehová. Y dió Hilcías el libro á Saphán.
16Y Saphán lo llevó al rey, y contóle el negocio, diciendo: Tus siervos han cumplido todo lo que les fué dado á cargo.
17Han reunido el dinero que se halló en la casa de Jehová, y lo han entregado en mano de los comisionados, y en mano de los que hacen la obra.
18A más de esto, declaró Saphán escriba al rey, diciendo: El sacerdote Hilcías me dió un libro. Y leyó Saphán en él delante del rey.
19Y luego que el rey oyó las palabras de la ley, rasgó sus vestidos;
20Y mandó á Hilcías y á Ahicam hijo de Saphán, y á Abdón hijo de Michâ, y á Saphán escriba, y á Asaía siervo del rey, diciendo:
21Andad, y consultad á Jehová de mí, y de las reliquias de Israel y de Judá, acerca de las palabras del libro que se ha hallado; porque grande es el furor de Jehová que ha caído sobre nosotros, por cuanto nuestros padres no guardaron la palabra de Jehová, para hacer conforme á todo lo que está escrito en este libro.
22Entonces Hilcías y los del rey fueron á Hulda profetisa, mujer de Sallum, hijo de Tikvath, hijo de Hasra, guarda de las vestimentas, la cual moraba en Jerusalem en la casa de la doctrina; y dijéronle las palabras dichas.
23Y ella respondió: Jehová el Dios de Israel ha dicho así: Decid al varón que os ha enviado á mí, que así ha dicho Jehová:
24He aquí yo traigo mal sobre este lugar, y sobre los moradores de él, y todas las maldiciones que están escritas en el libro que leyeron delante del rey de Judá:
25Por cuanto me han dejado, y han sacrificado á dioses ajenos, provocándome á ira en todas las obras de sus manos; por tanto mi furor destilará sobre este lugar, y no se apagará.
26Mas al rey de Judá, que os ha enviado á consultar á Jehová, así le diréis: Jehová el Dios de Israel ha dicho así: Por cuanto oiste las palabras del libro,
27Y tu corazón se enterneció, y te humillaste delante de Dios al oir sus palabras sobre este lugar, y sobre sus moradores, y te humillaste delante de mí, y rasgaste tus vestidos, y lloraste en mi presencia, yo también te he oído, dice Jehová.
28He aquí que yo te recogeré con tus padres, y serás recogido en tus sepulcros en paz, y tus ojos no verán todo el mal que yo traigo sobre este lugar, y sobre los moradores de él. Y ellos refirieron al rey la respuesta.
29Entonces el rey envió y juntó todos los ancianos de Judá y de Jerusalem.
30Y subió el rey á la casa de Jehová, y con él todos los varones de Judá, y los moradores de Jerusalem, y los sacerdotes, y los Levitas, y todo el pueblo desde el mayor hasta el más pequeño; y leyó á oídos de ellos todas las palabras del libro del pacto que había sido hallado en la casa de Jehová.
31Y estando el rey en pie en su sitio, hizo alianza delante de Jehová de caminar en pos de Jehová, y de guardar sus mandamientos, sus testimonios, y sus estatutos, de todo su corazón y de toda su alma, poniendo por obra las palabras del pacto que estaban escritas en aquel libro.
32E hizo que se obligaran á ello todos los que estaban en Jerusalem y en Benjamín: y los moradores de Jerusalem hicieron conforme al pacto de Dios, del Dios de sus padres.
33Y quitó Josías todas las abominaciones de todas las tierras de los hijos de Israel, é hizo á todos los que se hallaron en Israel que sirviesen á Jehová su Dios. No se apartaron de en pos de Jehová el Dios de sus padres, todo el tiempo que él vivió.
1Y Josias hizo pascua á Jehová en Jerusalem, y sacrificaron la pascua á los catorce del mes primero.
2Y puso á los sacerdotes en sus empleos, y confirmólos en el ministerio de la casa de Jehová.
3Y dijo á los Levitas que enseñaban á todo Israel, y que estaban dedicados á Jehová: Poned el arca del santuario en la casa que edificó Salomón hijo de David, rey de Israel, para que no la carguéis más sobre los hombros. Ahora serviréis á Jehová vuestro Dios, y á su pueblo Israel.
4Apercibío según las familias de vuestros padres, por vuestros órdenes, conforme á la prescripción de David rey de Israel, y de Salomón su hijo.
5Estad en el santuario según la distribución de las familias de vuestros hermanos los hijos del pueblo, y según la división de la familia de los Levitas.
6Sacrificad luego la pascua: y después de santificaros, apercibid á vuestros hermanos, para que hagan conforme á la palabra de Jehová dada por mano de Moisés.
7Y ofreció el rey Josías á los del pueblo ovejas, corderos, y cabritos de los rebaños, en número de treinta mil, y tres mil bueyes, todo para la pascua, para todos los que se hallaron presentes: esto de la hacienda del rey.
8También sus príncipes ofrecieron con liberalidad al pueblo, y á los sacerdotes y Levitas. Hilcías, Zachârías y Jehiel, príncipes de la casa de Dios, dieron á los sacerdotes para hacer la pascua dos mil seiscientas ovejas, y trescientos bueyes.
9Asimismo Chônanías, y Semeías y Nathanael sus hermanos, y Hasabías, Jehiel, y Josabad, príncipes de los Levitas, dieron á los Levitas para los sacrificios de la pascua cinco mil ovejas, y quinientos bueyes.
10Aprestado así el servicio, los sacerdotes se colocaron en sus puestos, y asimismo los Levitas en sus órdenes, conforme al mandamiento del rey.
11Y sacrificaron la pascua; y esparcían los sacerdotes la sangre tomada de mano de los Levitas, y los Levitas desollaban.
12Tomaron luego del holocausto, para dar conforme á los repartimientos por las familias de los del pueblo, á fin de que ofreciesen á Jehová, según está escrito en el libro de Moisés: y asimismo tomaron de los bueyes.
13Y asaron la pascua al fuego según la costumbre: mas lo que había sido santificado lo cocieron en ollas, en calderos, y calderas, y repartiéron lo prestamente á todo el pueblo.
14Y después aderezaron para sí y para los sacerdotes; porque los sacerdotes, hijos de Aarón, estuvieron ocupados hasta la noche en el sacrificio de los holocaustos y de los sebos; por tanto, los Levitas aderezaron para sí, y para los sacerdotes hijos de Aarón.
15Asimismo los cantores hijos de Asaph estaban en su puesto, conforme al mandamiento de David, de Asaph y de Hemán, y de Jeduthún vidente del rey; también los porteros estaban á cada puerta; y no era menester que se apartasen de su ministerio, porque sus hermanos los Levitas aparejaban para ellos.
16Así fué aprestado todo el servicio de Jehová en aquel día, para hacer la pascua, y sacrificar los holocaustos sobre el altar de Jehová, conforme al mandamiento del rey Josías.
17Y los hijos de Israel que se hallaron allí, hicieron la pascua en aquel tiempo, y la solemnidad de los panes sin levadura, por siete días.
18Nunca tal pascua fué hecha en Israel desde los días de Samuel el profeta; ni ningún rey de Israel hizo pascua tal como la que hizo el rey Josías, y los sacerdotes y Levitas, y todo Judá é Israel, los que se hallaron allí, juntamente con los moradores de Jerusalem.
19Esta pascua fué celebrada en el año dieciocho del rey Josías.
20Después de todas estas cosas, luego de haber Josías preparado la casa, Nechâo rey de Egipto subió á hacer guerra en Carchêmis junto á Eufrates; y salió Josías contra él.
21Y él le envió embajadores, diciendo: ¿Qué tenemos yo y tú, rey de Judá? Yo no vengo contra ti hoy, sino contra la casa que me hace guerra: y Dios dijo que me apresurase. Déjate de meterte con Dios, que es conmigo, no te destruya.
22Mas Josías no volvió su rostro de él, antes disfrazóse para darle batalla, y no atendió á las palabras de Nechâo, que eran de boca de Dios; y vino á darle la batalla en el campo de Megiddo.
23Y los archeros tiraron al rey Josías flechas; y dijo el rey á sus siervos: Quitadme de aquí, porque estoy herido gravemente.
24Entonces sus siervos lo quitaron de aquel carro, y pusiéronle en otro segundo carro que tenía, y lleváronle á Jerusalem, y murió; y sepultáronle en los sepulcros de sus padres. Y todo Judá y Jerusalem hizo duelo por Josías.
25Y endechó Jeremías por Josías, y todos los cantores y cantoras recitan sus lamentaciones sobre Josías hasta hoy; y las dieron por norma para endechar en Israel, las cuales están escritas en las Lamentaciones.
26Lo demás de los hechos de Josías, y sus piadosas obras, conforme á lo que está escrito en la ley de Jehová,
27Y sus hechos, primeros y postreros, he aquí está escrito en el libro de los reyes de Israel y de Judá.
(2 Cr. 34:1‑35:27)
;
Neh. 5:14‑19• 14También desde el día que me mandó el rey que fuese gobernador de ellos en la tierra de Judá, desde el año veinte del rey Artajerjes hasta el año treinta y dos, doce años, ni yo ni mis hermanos comimos el pan del gobernador.
15Mas los primeros gobernadores que fueron antes de mí, cargaron al pueblo, y tomaron de ellos por el pan y por el vino sobre cuarenta siclos de plata: á más de esto, sus criados se enseñoreaban sobre el pueblo; pero yo no hice así, á causa del temor de Dios.
16También en la obra de este muro instauré mi parte, y no compramos heredad: y todos mis criados juntos estaban allí á la obra.
17Además ciento y cincuenta hombres de los Judíos y magistrados, y los que venían á nosotros de las gentes que están en nuestros contornos, estaban á mi mesa.
18Y lo que se aderezaba para cada día era un buey, seis ovejas escogidas, y aves también se aparejaban para mí, y cada diez días vino en toda abundancia: y con todo esto nunca requerí el pan del gobernador, porque la servidumbre de este pueblo era grave.
19Acuérdate de mí para bien, Dios mío, y de todo lo que hice á este pueblo.
(Neh. 5:14‑19)
;
Is. 23:18• 18Mas su negociación y su ganancia será consagrada á Jehová: no se guardará ni se atesorará, porque su negociación será para los que estuvieren delante de Jehová, para que coman hasta hartarse, y vistan honradamente. (Is. 23:18)
;
Is. 49:23• 23Y reyes serán tus ayos, y sus reinas tus amas de leche; el rostro inclinado á tierra te adorarán, y lamerán el polvo de tus pies: y conocerás que yo soy Jehová, que no se avergonzarán los que me esperan. (Is. 49:23)
;
Is. 60:5‑16• 5Entonces verás y resplandecerás; y se maravillará y ensanchará tu corazón, que se haya vuelto á ti la multitud de la mar, y la fortaleza de las gentes haya venido á ti.
6Multitud de camellos te cubrirá, dromedarios de Madián y de Epha; vendrán todos los de Seba; traerán oro é incienso, y publicarán alabanzas de Jehová.
7Todo el ganado de Cedar será juntado para ti: carneros de Nebayoth te serán servidos: serán ofrecidos con agrado sobre mi altar, y glorificaré la casa de mi gloria.
8¿Quiénes son estos que vuelan como nubes, y como palomas á sus ventanas?
9Ciertamente á mí esperarán las islas, y las naves de Tarsis desde el principio, para traer tus hijos de lejos, su plata y su oro con ellos, al nombre de Jehová tu Dios, y al Santo de Israel, que te ha glorificado.
10Y los hijos de los extranjeros edificarán tus muros, y sus reyes te servirán; porque en mi ira te herí, mas en mi buena voluntad tendré de ti misericordia.
11Tus puertas estarán de continuo abiertas, no se cerrarán de día ni de noche, para que sea traída á ti fortaleza de gentes, y sus reyes conducidos.
12Porque la gente ó el reino que no te sirviere, perecerá; y del todo serán asoladas.
13La gloria del Líbano vendrá á ti, hayas, pinos, y bojes juntamente, para decorar el lugar de mi santuario; y yo honraré el lugar de mis pies.
14Y vendrán á ti humillados los hijos de los que te afligieron, y á las pisadas de tus pies se encorvarán todos los que te escarnecían, y llamarte han Ciudad de Jehová, Sión del Santo de Israel.
15En lugar de que has sido desechada y aborrecida, y que no había quien por ti pasase, ponerte he en gloria perpetua, gozo de generación y generación.
16Y mamarás la leche de las gentes, el pecho de los reyes mamarás; y conocerás que yo Jehová soy el Salvador tuyo, y Redentor tuyo, el Fuerte de Jacob.
(Is. 60:5‑16)
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Hch. 13:36• 36Porque á la verdad David, habiendo servido en su edad á la voluntad de Dios, durmió, y fué juntado con sus padres, y vió corrupción. (Hch. 13:36)
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Ro. 15:18‑19• 18Porque no osaría hablar alguna cosa que Cristo no haya hecho por mí para la obediencia de los Gentiles, con la palabra y con las obras,
19Con potencia de milagros y prodigios, en virtud del Espíritu de Dios: de manera que desde Jerusalem, y por los alrededores hasta Ilírico, he llenado todo del evangelio de Cristo.
(Ro. 15:18‑19)
;
1 Co. 9:16‑23• 16Pues bien que anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme porque me es impuesta necesidad; y ay de mí si no anunciare el evangelio!
17Por lo cual, si lo hago de voluntad, premio tendré; mas si por fuerza, la dispensación me ha sido encargada.
18¿Cuál, pues, es mi merced? Que predicando el evangelio, ponga el evangelio de Cristo de balde, para no usar mal de mi potestad en el evangelio.
19Por lo cual, siendo libre para con todos, me he hecho siervo de todos por ganar á más.
20Heme hecho á los Judíos como Judío, por ganar á los Judíos; á los que están sujetos á la ley (aunque yo no sea sujeto á la ley) como sujeto á la ley, por ganar á los que están sujetos á la ley;
21A los que son sin ley, como si yo fuera sin ley, (no estando yo sin ley de Dios, mas en la ley de Cristo) por ganar á los que estaban sin ley.
22Me he hecho á los flacos flaco, por ganar á los flacos: á todos me he hecho todo, para que de todo punto salve á algunos.
23Y esto hago por causa del evangelio, por hacerme juntamente participante de él.
(1 Co. 9:16‑23)
;
1 Co. 15:10• 10Empero por la gracia de Dios soy lo que soy: y su gracia no ha sido en vano para conmigo; antes he trabajado más que todos ellos: pero no yo, sino la gracia de Dios que fué conmigo. (1 Co. 15:10)
;
1 Ti. 6:17‑18• 17A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en la incertidumbre de las riquezas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia de que gocemos:
18Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, que con facilidad comuniquen;
(1 Ti. 6:17‑18)
;
2 Ti. 2:6• 6El labrador, para recibir los frutos, es menester que trabaje primero. (2 Ti. 2:6)
;
2 Ti. 4:5‑8• 5Pero tú vela en todo, soporta las aflicciones, haz la obra de evangelista, cumple tu ministerio.
6Porque yo ya estoy para ser ofrecido, y el tiempo de mi partida está cercano.
7He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe.
8Por lo demás, me está guardada la corona de justicia, la cual me dará el Señor, juez justo, en aquel día; y no sólo á mí, sino también á todos los que aman su venida.
(2 Ti. 4:5‑8)
;
Flm. 6‑7• 6Para que la comunicación de tu fe sea eficaz, en el conocimiento de todo el bien que está en vosotros, por Cristo Jesús.
7Porque tenemos gran gozo y consolación de tu caridad, de que por ti, oh hermano, han sido recreadas las entrañas de los santos.
(Flm. 6‑7)
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3 Jn. 5‑8• 5Amado, fielmente haces todo lo que haces para con los hermanos, y con los extranjeros,
6Los cuales han dado testimonio de tu amor en presencia de la iglesia: á los cuales si ayudares como conviene según Dios, harás bien.
7Porque ellos partieron por amor de su nombre, no tomando nada de los Gentiles.
8Nosotros, pues, debemos recibir á los tales, para que seamos cooperadores á la verdad.
(3 Jn. 5‑8)

J. N. Darby Translation

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16
And he that had received the five talents went and trafficked with them, and made five other talents.

W. Kelly Translation

+
16
Straightway he that received the five talents proceeded, and traded with them, and made other five talents.