1 Cr. 22:1‑26:32• 1Y dijo David: Esta es la casa de Jehová Dios, y este es el altar del holocausto para Israel.
2Después mandó David que se juntasen los extranjeros que estaban en la tierra de Israel, y señaló de ellos canteros que labrasen piedras para edificar la casa de Dios.
3Asimismo aparejó David mucho hierro para la clavazón de las puertas, y para las junturas; y mucho metal sin peso, y madera de cedro sin cuenta.
4Porque los Sidonios y Tirios habían traído á David madera de cedro innumerable.
5Y dijo David: Salomón mi hijo es muchacho y tierno, y la casa que se ha de edificar á Jehová ha de ser magnífica por excelencia, para nombre y honra en todas las tierras; ahora pues yo le aparejaré lo necesario. Y preparó David antes de su muerte en grande abundancia.
6Llamó entonces David á Salomón su hijo, y mandóle que edificase casa á Jehová Dios de Israel.
7Y dijo David á Salomón: Hijo mío, en mi corazón tuve el edificar templo al nombre de Jehová mi Dios.
8Mas vino á mí palabra de Jehová, diciendo: Tú has derramado mucha sangre, y has traído grandes guerras: no edificarás casa á mi nombre, porque has derramado mucha sangre en la tierra delante de mí:
9He aquí, un hijo te nacerá, el cual será varón de reposo, porque yo le daré quietud de todos sus enemigos en derredor; por tanto su nombre será Salomón; y yo daré paz y reposo sobre Israel en sus días:
10El edificará casa á mi nombre, y él me será á mí por hijo, y yo le seré por padre; y afirmaré el trono de su reino sobre Israel para siempre.
11Ahora pues, hijo mío, sea contigo Jehová, y seas prosperado, y edifiques casa á Jehová tu Dios, como él ha dicho de ti.
12Y Jehová te dé entendimiento y prudencia, y él te dé mandamientos para Israel; y que tú guardes la ley de Jehová tu Dios.
13Entonces serás prosperado, si cuidares de poner por obra los estatutos y derechos que Jehová mandó á Moisés para Israel. Esfuérzate pues, y cobra ánimo; no temas, ni desmayes.
14He aquí, yo en mi estrechez he prevenido para la casa de Jehová cien mil talentos de oro, y un millar de millares de talentos de plata: no tiene peso el metal ni el hierro, porque es mucho. Asimismo he aprestado madera y piedra, á lo cual tú añadirás.
15Tú tienes contigo muchos oficiales, canteros, albañiles, y carpinteros, y todo hombre experto en toda obra.
16Del oro, de la plata, del metal, y del hierro, no hay número. Levántate pues, y á la obra; que Jehová será contigo.
17Asimismo mandó David á todos los principales de Israel que diesen ayuda á Salomón su hijo, diciendo:
18¿No es con vosotros Jehová vuestro Dios, el cual os ha dado quietud de todas partes? porque él ha entregado en mi mano los moradores de la tierra, y la tierra ha sido sujetada delante de Jehová, y delante de su pueblo.
19Poned, pues, ahora vuestros corazones y vuestros ánimos en buscar á Jehová vuestro Dios; y levantaos, y edificad el santuario del Dios Jehová, para traer el arca del pacto de Jehová, y lo santos vasos de Dios, á la casa edificada al nombre de Jehová.
1Siendo pues David ya viejo y harto de días, hizo á Salomón su hijo rey sobre Israel.
2Y juntando á todos los principales de Israel, y á los sacerdotes y Levitas,
3Fueron contados los Levitas de treinta años arriba; y fué el número de ellos por sus cabezas, contados uno á uno, treinta y ocho mil.
4De éstos, veinticuatro mil para dar prisa á la obra de la casa de Jehová; y gobernadores y jueces, seis mil;
5Además cuatro mil porteros; y cuatro mil para alabar á Jehová, dijo David, con los instrumentos que he hecho para rendir alabanzas.
6Y repartiólos David en órdenes conforme á los hijos de Leví, Gersón y Coath y Merari.
7Los hijos de Gersón: Ladán, y Simi.
8Los hijos de Ladán, tres: Jehiel el primero, después Zetham y Joel.
9Los hijos de Simi, tres: Selomith, Haziel, y Arán. Estos fueron los príncipes de las familias de Ladán.
10Y los hijos de Simi: Jahath, Zinat, Jeus, y Berías. Estos cuatro fueron los hijos de Simi.
11Jahat era el primero, Zinat el segundo; mas Jeus y Berías no multiplicaron en hijos, por lo cual fueron contados por una familia.
12Los hijos de Coath: Amram, Ishar, Hebrón, y Uzziel, ellos cuatro.
13Los hijos de Amram: Aarón y Moisés. Y Aarón fué apartado para ser dedicado á las más santas cosas, él y sus hijos para siempre, para que quemasen perfumes delante de Jehová, y le ministrasen, y bendijesen en su nombre, para siempre.
14Y los hijos de Moisés, varón de Dios, fueron contados en la tribu de Leví.
15Los hijos de Moisés fueron Gersón y Eliezer.
16Hijo de Gersón fué Sebuel el primero.
17E hijo de Eliezer fué Rehabía el primero. Y Eliezer no tuvo otros hijos; mas los hijos de Rehabía fueron muchos.
18Hijo de Ishar fué Selomith el primero.
19Los hijos de Hebrón: Jería el primero, Amarías el segundo, Jahaziel el tercero, y Jecamán el cuarto.
20Los hijos de Uzziel: Michâ el primero, é Isía el segundo.
21Los hijos de Merari: Mahali y Musi. Los hijos de Mahali: Eleazar y Cis.
22Y murió Eleazar sin hijos, mas tuvo hijas; y los hijos de Cis, sus hermanos, las tomaron por mujeres.
23Los hijos de Musi: Mahali, Eder y Jerimoth, ellos tres.
24Estos son los hijos de Leví en las familias de sus padres, cabeceras de familias en sus delineaciones, contados por sus nombres, por sus cabezas, los cuales hacían obra en el ministerio de la casa de Jehová, de veinte años arriba.
25Porque David dijo: Jehová Dios de Israel ha dado reposo á su pueblo Israel, y el habitar en Jerusalem para siempre.
26Y también los Levitas no llevarán más el tabernáculo, y todos sus vasos para su ministerio.
27Así que, conforme á las postreras palabras de David, fué la cuenta de los hijos de Leví de veinte años arriba.
28Y estaban bajo la mano de los hijos de Aarón, para ministrar en la casa de Jehová, en los atrios y en las cámaras, y en la purificación de toda cosa santificada, y en la demás obra del ministerio de la casa de Dios;
29Asimismo para los panes de la proposición, y para la flor de la harina para el sacrificio, y para las hojuelas sin levadura, y para la fruta de sartén, y para lo tostado, y para toda medida y cuenta;
30Y para que asistiesen cada mañana todos los días á confesar y alabar á Jehová, y asimismo á la tarde;
31Y para ofrecer todos los holocaustos á Jehová los sábados, nuevas lunas, y solemnidades, por la cuenta y forma que tenían, continuamente delante de Jehová.
32Y para que tuviesen la guarda del tabernáculo del testimonio, y la guarda del santuario, y las órdenes de los hijos de Aarón sus hermanos, en el ministerio de la casa de Jehová.
1También los hijos de Aarón tuvieron sus repartimientos. Los hijos de Aarón: Nadab, Abiú, Eleazar é Ithamar.
2Mas Nadab, y Abiú murieron antes que su padre, y no tuvieron hijos: Eleazar é Ithamar tuvieron el sacerdocio.
3Y David los repartió, siendo Sadoc de los hijos de Eleazar, y Ahimelech de los hijos de Ithamar, por sus turnos en su ministerio.
4Y los hijos de Eleazar fueron hallados, cuanto á sus principales varones, muchos más que los hijos de Ithamar; y repartiéronlos así: De los hijos de Eleazar había dieciséis cabezas de familias paternas; y de los hijos de Ithamar por las familias de sus padres, ocho.
5Repartiéronlos pues por suerte los unos con los otros: porque de los hijos de Eleazar y de los hijos de Ithamar hubo príncipes del santuario, y príncipes de la casa de Dios.
6Y Semeías escriba, hijo de Nathanael, de los Levitas, escribiólos delante del rey y de los príncipes, y delante de Sadoc el sacerdote, y de Ahimelech hijo de Abiathar, y de los príncipes de las familias de los sacerdotes y Levitas: y adscribían una familia á Eleazar, y á Ithamar otra.
7Y la primera suerte salió por Joiarib, la segunda por Jedaía;
8La tercera por Harim, la cuarta por Seorim;
9La quinta por Malchîas, la sexta por Miamim;
10La séptima por Cos, la octava por Abías;
11La nona por Jesua, la décima por Sechânía;
12La undécima por Eliasib, la duodécima por Jacim;
13La décimatercia por Uppa, la décimacuarta por Isebeab;
14La décimaquinta por Bilga, la décimasexta por Immer;
15La décimaséptima por Hezir, la décimaoctava por Aphses;
16La décimanona por Pethaía, la vigésima por Hezeciel;
17La vigésimaprima por Jachim, la vigésimasegunda por Hamul;
18La vigésimatercia por Delaía, la vigésimacuarta por Maazía.
19Estos fueron contados en su ministerio, para que entrasen en la casa de Jehová, conforme á su ordenanza, bajo el mando de Aarón su padre, de la manera que le había mandado Jehová el Dios de Israel.
20Y de los hijos de Leví que quedaron: Subael, de los hijos de Amram; y de los hijos de Subael, Jehedías.
21Y de los hijos de Rehabía, Isias el principal.
22De los Ishareos, Selemoth; é hijo de Selemoth, Jath.
23Y de los hijos de Hebrón; Jeria el primero, el segundo Amarías, el tercero Jahaziel, el cuarto Jecamán.
24Hijo de Uzziel, Michâ; é hijo de Michâ, Samir.
25Hermano de Michâ, Isía; é hijo de Isía, Zachârías.
26Los hijos de Merari: Mahali y Musi; hijo de Jaazia, Benno.
27Los hijos de Merari por Jaazia: Benno, y Soam, Zachûr é Ibri.
28Y de Mahali, Eleazar, el cual no tuvo hijos.
29Hijo de Cis, Jerameel.
30Los hijos de Musi: Maheli, Eder y Jerimoth. Estos fueron los hijos de los Levitas conforme á las casas de sus familias.
31Estos también echaron suertes, como sus hermanos los hijos de Aarón, delante del rey David, y de Sadoc y de Ahimelech, y de los príncipes de las familias de los sacerdotes y Levitas: el principal de los padres igualmente que el menor de sus hermanos.
1Asimismo David y los príncipes del ejército apartaron para el ministerio á los hijos de Asaph, y de Hemán, y de Jeduthún, los cuales profetizasen con arpas, salterios, y címbalos: y el número de ellos fué, de hombres idóneos para la obra de su ministerio respectivo:
2De los hijos de Asaph: Zachûr, José, Methanías, y Asareela, hijos de Asaph, bajo la dirección de Asaph, el cual profetizaba á la orden del rey.
3De Jeduthún: los hijos de Jeduthún, Gedalías, Sesi, Jesaías, Hasabías, y Mathithías, y Simi: seis, bajo la mano de su padre Jeduthún, el cual profetizaba con arpa, para celebrar y alabar á Jehová.
4De Hemán: los hijos de Hemán, Buccia, Mathanía, Uzziel, Sebuel, Jerimoth, Hananías, Hanani, Eliatha, Gidalthi, Romamti-ezer, Josbecasa, Mallothi, Othir, y Mahazioth.
5Todos estos fueron hijos de Hemán, vidente del rey en palabras de Dios, para ensalzar el poder suyo: y dió Dios á Hemán catorce hijos y tres hijas.
6Y todos estos estaban bajo la dirección de su padre en la música, en la casa de Jehová, con címbalos, salterios y arpas, para el ministerio del templo de Dios, por disposición del rey acerca de Asaph, de Jeduthún, y de Hemán.
7Y el número de ellos con sus hermanos instruídos en música de Jehová, todos los aptos, fué doscientos ochenta y ocho.
8Y echaron suertes para los turnos del servicio, entrando el pequeño con el grande, lo mismo el maestro que el discípulo.
9Y la primera suerte salió por Asaph, á José: la segunda á Gedalías, quien con sus hermanos é hijos fueron doce;
10La tercera á Zachûr, con sus hijos y sus hermanos, doce;
11La cuarta á Isri, con sus hijos y sus hermanos, doce;
12La quinta á Nethanías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
13La sexta á Buccia, con sus hijos y sus hermanos, doce;
14La séptima á Jesarela, con sus hijos y sus hermanos, doce;
15La octava á Jesahías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
16La nona á Mathanías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
17La décima á Simi, con sus hijos y sus hermanos, doce;
18La undécima á Azareel, con sus hijos y sus hermanos, doce;
19La duodécima á Hasabías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
20La décimatercia á Subael, con sus hijos y sus hermanos, doce;
21La décimacuarta á Mathithías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
22La décimaquinta á Jerimoth, con sus hijos y sus hermanos, doce;
23La décimasexta á Hananías, con sus hijos y sus hermanos, doce;
24La décimaséptima á Josbecasa, con sus hijos y sus hermanos, doce;
25La décimaoctava á Hanani, con sus hijos y sus hermanos, doce;
26La décimanona á Mallothi, con sus hijos y sus hermanos, doce;
27La vigésima á Eliatha, con sus hijos y sus hermanos, doce;
28La vigésimaprima á Othir, con sus hijos y sus hermanos, doce;
29La vigésimasegunda á Giddalthi, con sus hijos y sus hermanos, doce;
30La vigésimatercia á Mahazioth, con sus hijos y sus hermanos, doce;
31La vigésimacuarta á Romamti-ezer, con sus hijos y sus hermanos, doce.
1Cuanto á los repartimientos de los porteros: De los Coraitas: Meselemia hijo de Coré, de los hijos de Asaph.
2Los hijos de Meselemia: Zachârías el primogénito, Jediael el segundo, Zebadías el tercero, Jatnael el cuarto;
3Elam el quinto, Johanam el sexto, Elioenai el séptimo.
4Los hijos de Obed-edom: Semeías el primogénito, Jozabad el segundo, Joab el tercero, el cuarto Sachâr, el quinto Nathanael;
5El sexto Anmiel, el séptimo Issachâr, el octavo Peullethai: porque Dios había bendecido á Obed-edom.
6También de Semeías su hijo nacieron hijos que fueron señores sobre la casa de sus padres; porque eran varones muy valerosos.
7Los hijos de Semeías: Othni, Raphael, Obed, Elzabad, y sus hermanos, hombres esforzados; asimismo Eliú, y Samachîas.
8Todos estos de los hijos de Obed-edom: ellos con sus hijos y sus hermanos, hombres robustos y fuertes para el ministerio; sesenta y dos, de Obed-edom.
9Y los hijos de Meselemia y sus hermanos, dieciocho hombres valientes.
10De Hosa, de los hijos de Merari: Simri el principal, (aunque no era el primogénito, mas su padre lo puso para que fuese cabeza;)
11El segundo Hilcías, el tercero Tebelías, el cuarto Zachârías: todos los hijos de Hosa y sus hermanos fueron trece.
12Entre estos se hizo la distribución de los porteros, alternando los principales de los varones en la guardia con sus hermanos, para servir en la casa de Jehová.
13Y echaron suertes, el pequeño con el grande, por las casas de sus padres, para cada puerta.
14Y cayó la suerte al oriente á Selemía. Y á Zachârías su hijo, consejero entendido, metieron en las suertes: y salió la suerte suya al norte.
15Y por Obed-edom, al mediodía; y por sus hijos, la casa de la consulta.
16Por Suppim y Hosa al occidente, con la puerta de Sallechêt al camino de la subida, guardia contra guardia.
17Al oriente seis Levitas, al norte cuatro de día; al mediodía cuatro de día; y á la casa de la consulta, de dos en dos.
18En la cámara de los vasos al occidente, cuatro al camino, y dos en la cámara.
19Estos son los repartimientos de los porteros, hijos de los Coraitas, y de los hijos de Merari.
20Y de los Levitas, Achîas tenía cargo de los tesoros de la casa de Dios, y de los tesoros de las cosas santificadas.
21Cuanto á los hijos de Ladán, hijos de Gersón: de Ladán, los príncipes de las familias de Ladán fueron Gersón, y Jehieli.
22Los hijos de Jehieli, Zethán y Joel su hermano, tuvieron cargo de los tesoros de la casa de Jehová.
23Acerca de los Amramitas, de los Isharitas, de los Hebronitas, y de los Uzzielitas,
24Sebuel hijo de Gersón, hijo de Moisés, era principal sobre los tesoros.
25En orden á su hermano Eliezer, hijo de éste era Rehabía, hijo de éste Isaías, hijo de éste Joram, hijo de éste Zichri, del que fué hijo Selomith.
26Este Selomith y sus hermanos tenían cargo de todos los tesoros de todas las cosas santificadas, que había consagrado el rey David, y los príncipes de las familias, y los capitanes de millares y de cientos, y los jefes del ejército;
27De lo que habían consagrado de las guerras y de los despojos, para reparar la casa de Jehová.
28Asimismo todas las cosas que había consagrado Samuel vidente, y Saúl hijo de Cis, y Abner hijo de Ner, y Joab hijo de Sarvia: y todo lo que cualquiera consagraba, estaba bajo la mano de Selomith y de sus hermanos.
29De los Isharitas, Chenanía y sus hijos eran gobernadores y jueces sobre Israel en las obras de fuera.
30De los Hebronitas, Hasabías y sus hermanos, hombres de vigor, mil y setecientos, gobernaban á Israel de la otra parte del Jordán, al occidente, en toda la obra de Jehová, y en el servicio del rey.
31De los Hebronitas, Jerías era el principal entre los Hebronitas repartidos en sus linajes por sus familias. En el año cuarenta del reinado de David se registraron, y halláronse entre ellos fuertes y vigorosos en Jazer de Galaad.
32Y sus hermanos, hombres valientes, eran dos mil y setecientos, cabezas de familias, los cuales el rey David constituyó sobre los Rubenitas, Gaditas, y sobre la media tribu de Manasés, para todas las cosas de Dios, y los negocios del rey. (1 Cr. 22:1‑26:32)
2 Cr. 34:1‑35:27• 1De ocho años era Josías cuando comenzó á reinar, y treinta y un años reinó en Jerusalem.
2Este hizo lo recto en ojos de Jehová, y anduvo en los caminos de David su padre, sin apartarse á la diestra ni á la siniestra.
3A los ocho años de su reinado, siendo aún muchacho, comenzó á buscar al Dios de David su padre; y á los doce años comenzó á limpiar á Judá y á Jerusalem de los altos, bosques, esculturas, é imágenes de fundición.
4Y derribaron delante de él los altares de los Baales, é hizo pedazos las imágenes del sol, que estaban puestas encima; despedazó también los bosques, y las esculturas y estatuas de fundición, y desmenuzólas, y esparció el polvo sobre los sepulcros de los que las habían sacrificado.
5Quemó además los huesos de los sacerdotes sobre sus altares, y limpió á Judá y á Jerusalem.
6Lo mismo hizo en las ciudades de Manasés, Ephraim, y Simeón, hasta en Nephtalí, con sus lugares asolados alrededor.
7Y como hubo derribado los altares y los bosques, y quebrado y desmenuzado las esculturas, y destruído todos los ídolos por toda la tierra de Israel, volvióse á Jerusalem.
8A los dieciocho años de su reinado, después de haber limpiado la tierra, y la casa, envió á Saphán hijo de Asalías, y á Maasías gobernador de la ciudad, y á Joah hijo de Joachâz, canciller, para que reparasen la casa de Jehová su Dios.
9Los cuales vinieron á Hilcías, gran sacerdote, y dieron el dinero que había sido metido en la casa de Jehová, que los Levitas que guardaban la puerta habían recogido de mano de Manasés y de Ephraim y de todas las reliquias de Israel, y de todo Judá y Benjamín, habiéndose después vuelto á Jerusalem.
10Y entregáronlo en mano de los que hacían la obra, que eran sobrestantes en la casa de Jehová; los cuales lo daban á los que hacían la obra y trabajaban en la casa de Jehová, para reparar y restaurar el templo.
11Daban asimismo á los oficiales y albañiles para que comprasen piedra de cantería, y madera para las trabazones, y para entabladura de las casas, las cuales habían destruído los reyes de Judá.
12Y estos hombres procedían con fidelidad en la obra: y eran sus gobernadores Jahath y Abdías, Levitas de los hijos de Merari; y Zachârías y Mesullam de los hijos de Coath, para que activasen la obra; y de los Levitas, todos los entendidos en instrumentos de música.
13También velaban sobre los ganapanes, y eran sobrestantes de los que se ocupaban en cualquier clase de obra; y de los Levitas había esribas, gobernadores, y porteros.
14Y al sacar el dinero que había sido metido en la casa de Jehová, Hilcías el sacerdote halló el libro de la ley de Jehová dada por mano de Moisés.
15Y dando cuenta Hilcías, dijo á Saphán escriba: Yo he hallado el libro de la ley en la casa de Jehová. Y dió Hilcías el libro á Saphán.
16Y Saphán lo llevó al rey, y contóle el negocio, diciendo: Tus siervos han cumplido todo lo que les fué dado á cargo.
17Han reunido el dinero que se halló en la casa de Jehová, y lo han entregado en mano de los comisionados, y en mano de los que hacen la obra.
18A más de esto, declaró Saphán escriba al rey, diciendo: El sacerdote Hilcías me dió un libro. Y leyó Saphán en él delante del rey.
19Y luego que el rey oyó las palabras de la ley, rasgó sus vestidos;
20Y mandó á Hilcías y á Ahicam hijo de Saphán, y á Abdón hijo de Michâ, y á Saphán escriba, y á Asaía siervo del rey, diciendo:
21Andad, y consultad á Jehová de mí, y de las reliquias de Israel y de Judá, acerca de las palabras del libro que se ha hallado; porque grande es el furor de Jehová que ha caído sobre nosotros, por cuanto nuestros padres no guardaron la palabra de Jehová, para hacer conforme á todo lo que está escrito en este libro.
22Entonces Hilcías y los del rey fueron á Hulda profetisa, mujer de Sallum, hijo de Tikvath, hijo de Hasra, guarda de las vestimentas, la cual moraba en Jerusalem en la casa de la doctrina; y dijéronle las palabras dichas.
23Y ella respondió: Jehová el Dios de Israel ha dicho así: Decid al varón que os ha enviado á mí, que así ha dicho Jehová:
24He aquí yo traigo mal sobre este lugar, y sobre los moradores de él, y todas las maldiciones que están escritas en el libro que leyeron delante del rey de Judá:
25Por cuanto me han dejado, y han sacrificado á dioses ajenos, provocándome á ira en todas las obras de sus manos; por tanto mi furor destilará sobre este lugar, y no se apagará.
26Mas al rey de Judá, que os ha enviado á consultar á Jehová, así le diréis: Jehová el Dios de Israel ha dicho así: Por cuanto oiste las palabras del libro,
27Y tu corazón se enterneció, y te humillaste delante de Dios al oir sus palabras sobre este lugar, y sobre sus moradores, y te humillaste delante de mí, y rasgaste tus vestidos, y lloraste en mi presencia, yo también te he oído, dice Jehová.
28He aquí que yo te recogeré con tus padres, y serás recogido en tus sepulcros en paz, y tus ojos no verán todo el mal que yo traigo sobre este lugar, y sobre los moradores de él. Y ellos refirieron al rey la respuesta.
29Entonces el rey envió y juntó todos los ancianos de Judá y de Jerusalem.
30Y subió el rey á la casa de Jehová, y con él todos los varones de Judá, y los moradores de Jerusalem, y los sacerdotes, y los Levitas, y todo el pueblo desde el mayor hasta el más pequeño; y leyó á oídos de ellos todas las palabras del libro del pacto que había sido hallado en la casa de Jehová.
31Y estando el rey en pie en su sitio, hizo alianza delante de Jehová de caminar en pos de Jehová, y de guardar sus mandamientos, sus testimonios, y sus estatutos, de todo su corazón y de toda su alma, poniendo por obra las palabras del pacto que estaban escritas en aquel libro.
32E hizo que se obligaran á ello todos los que estaban en Jerusalem y en Benjamín: y los moradores de Jerusalem hicieron conforme al pacto de Dios, del Dios de sus padres.
33Y quitó Josías todas las abominaciones de todas las tierras de los hijos de Israel, é hizo á todos los que se hallaron en Israel que sirviesen á Jehová su Dios. No se apartaron de en pos de Jehová el Dios de sus padres, todo el tiempo que él vivió.
1Y Josias hizo pascua á Jehová en Jerusalem, y sacrificaron la pascua á los catorce del mes primero.
2Y puso á los sacerdotes en sus empleos, y confirmólos en el ministerio de la casa de Jehová.
3Y dijo á los Levitas que enseñaban á todo Israel, y que estaban dedicados á Jehová: Poned el arca del santuario en la casa que edificó Salomón hijo de David, rey de Israel, para que no la carguéis más sobre los hombros. Ahora serviréis á Jehová vuestro Dios, y á su pueblo Israel.
4Apercibío según las familias de vuestros padres, por vuestros órdenes, conforme á la prescripción de David rey de Israel, y de Salomón su hijo.
5Estad en el santuario según la distribución de las familias de vuestros hermanos los hijos del pueblo, y según la división de la familia de los Levitas.
6Sacrificad luego la pascua: y después de santificaros, apercibid á vuestros hermanos, para que hagan conforme á la palabra de Jehová dada por mano de Moisés.
7Y ofreció el rey Josías á los del pueblo ovejas, corderos, y cabritos de los rebaños, en número de treinta mil, y tres mil bueyes, todo para la pascua, para todos los que se hallaron presentes: esto de la hacienda del rey.
8También sus príncipes ofrecieron con liberalidad al pueblo, y á los sacerdotes y Levitas. Hilcías, Zachârías y Jehiel, príncipes de la casa de Dios, dieron á los sacerdotes para hacer la pascua dos mil seiscientas ovejas, y trescientos bueyes.
9Asimismo Chônanías, y Semeías y Nathanael sus hermanos, y Hasabías, Jehiel, y Josabad, príncipes de los Levitas, dieron á los Levitas para los sacrificios de la pascua cinco mil ovejas, y quinientos bueyes.
10Aprestado así el servicio, los sacerdotes se colocaron en sus puestos, y asimismo los Levitas en sus órdenes, conforme al mandamiento del rey.
11Y sacrificaron la pascua; y esparcían los sacerdotes la sangre tomada de mano de los Levitas, y los Levitas desollaban.
12Tomaron luego del holocausto, para dar conforme á los repartimientos por las familias de los del pueblo, á fin de que ofreciesen á Jehová, según está escrito en el libro de Moisés: y asimismo tomaron de los bueyes.
13Y asaron la pascua al fuego según la costumbre: mas lo que había sido santificado lo cocieron en ollas, en calderos, y calderas, y repartiéron lo prestamente á todo el pueblo.
14Y después aderezaron para sí y para los sacerdotes; porque los sacerdotes, hijos de Aarón, estuvieron ocupados hasta la noche en el sacrificio de los holocaustos y de los sebos; por tanto, los Levitas aderezaron para sí, y para los sacerdotes hijos de Aarón.
15Asimismo los cantores hijos de Asaph estaban en su puesto, conforme al mandamiento de David, de Asaph y de Hemán, y de Jeduthún vidente del rey; también los porteros estaban á cada puerta; y no era menester que se apartasen de su ministerio, porque sus hermanos los Levitas aparejaban para ellos.
16Así fué aprestado todo el servicio de Jehová en aquel día, para hacer la pascua, y sacrificar los holocaustos sobre el altar de Jehová, conforme al mandamiento del rey Josías.
17Y los hijos de Israel que se hallaron allí, hicieron la pascua en aquel tiempo, y la solemnidad de los panes sin levadura, por siete días.
18Nunca tal pascua fué hecha en Israel desde los días de Samuel el profeta; ni ningún rey de Israel hizo pascua tal como la que hizo el rey Josías, y los sacerdotes y Levitas, y todo Judá é Israel, los que se hallaron allí, juntamente con los moradores de Jerusalem.
19Esta pascua fué celebrada en el año dieciocho del rey Josías.
20Después de todas estas cosas, luego de haber Josías preparado la casa, Nechâo rey de Egipto subió á hacer guerra en Carchêmis junto á Eufrates; y salió Josías contra él.
21Y él le envió embajadores, diciendo: ¿Qué tenemos yo y tú, rey de Judá? Yo no vengo contra ti hoy, sino contra la casa que me hace guerra: y Dios dijo que me apresurase. Déjate de meterte con Dios, que es conmigo, no te destruya.
22Mas Josías no volvió su rostro de él, antes disfrazóse para darle batalla, y no atendió á las palabras de Nechâo, que eran de boca de Dios; y vino á darle la batalla en el campo de Megiddo.
23Y los archeros tiraron al rey Josías flechas; y dijo el rey á sus siervos: Quitadme de aquí, porque estoy herido gravemente.
24Entonces sus siervos lo quitaron de aquel carro, y pusiéronle en otro segundo carro que tenía, y lleváronle á Jerusalem, y murió; y sepultáronle en los sepulcros de sus padres. Y todo Judá y Jerusalem hizo duelo por Josías.
25Y endechó Jeremías por Josías, y todos los cantores y cantoras recitan sus lamentaciones sobre Josías hasta hoy; y las dieron por norma para endechar en Israel, las cuales están escritas en las Lamentaciones.
26Lo demás de los hechos de Josías, y sus piadosas obras, conforme á lo que está escrito en la ley de Jehová,
27Y sus hechos, primeros y postreros, he aquí está escrito en el libro de los reyes de Israel y de Judá. (2 Cr. 34:1‑35:27)