Cantar de los cantares 2 (Spanish RV 1909) - Bible Truth Library

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Song of Solomon 2

Cnt. 2:14 KJV (With Strong’s)

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14

O my dove, that art in the clefts of the rock, in the secret places of the stairs, let me see thy countenance, let me hear thy voice; for sweett is thy voice, and thy countenance is comely.

t

Pr. 15:8• ⁸El sacrificio de los impíos es abominación á Jehová: Mas la oración de los rectos es su gozo. (Pr. 15:8)

;

Ap. 5:8• ⁸Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro animales y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero, teniendo cada uno arpas, y copas de oro llenas de perfumes, que son las oraciones de los santos: (Ap. 5:8)

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my dove.

Cnt. 5:2• ²Yo dormía, pero mi corazón velaba: La voz de mi amado que llamaba: Abreme, hermana mía, amiga mía, paloma mía, perfecta mía; Porque mi cabeza está llena de rocío, Mis cabellos de las gotas de la noche. (Cnt. 5:2)

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Cnt. 6:9• ⁹Mas una es la paloma mía, la perfecta mía; Unica es á su madre, Escogida á la que la engendró. Viéronla las doncellas, y llamáronla bienaventurada; Las reinas y las concubinas, y la alabaron. (Cnt. 6:9)

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Sal. 68:13• ¹³Bien que fuiesteis echados entre los tiestos, Seréis como las alas de la paloma cubierta de plata, Y sus plumas con amarillez de oro. (Sal. 68:13)

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Sal. 74:19• ¹⁹No entregues á las bestias el alma de tu tórtola: Y no olvides para siempre la congregación de tus afligidos. (Sal. 74:19)

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Is. 60:8• ⁸¿Quiénes son estos que vuelan como nubes, y como palomas á sus ventanas? (Is. 60:8)

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Ez. 7:16• ¹⁶Y los que escaparen de ellos, huirán y estarán sobre los montes como palomas de los valles, gimiendo todos cada uno por su iniquidad. (Ez. 7:16)

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Mt. 3:16• ¹⁶Y Jesús, después que fué bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vió al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. (Mt. 3:16)

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Mt. 10:16• ¹⁶He aquí, yo os envío como á ovejas en medio de lobos: sed pues prudentes como serpientes, y sencillos como palomas. (Mt. 10:16)

that art.

Éx. 3:6• ⁶Y dijo: Yo soy el Dios de tu padre, Dios de Abraham, Dios de Isaac, Dios de Jacob. Entonces Moisés cubrió su rostro, porque tuvo miedo de mirar á Dios. (Éx. 3:6)

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Éx. 4:11‑13• ¹¹Y Jehová le respondió: ¿Quién dió la boca al hombre? ¿ó quién hizo al mudo y al sordo, al que ve y al ciego? ¿no soy yo Jehová?
¹²Ahora pues, ve, que yo seré en tu boca, y te enseñaré lo que hayas de hablar.
¹³Y él dijo: Ay Señor! envía por mano del que has de enviar. (Éx. 4:11‑13)

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Esd. 9:5‑6• ⁵Y al sacrificio de la tarde levantéme de mi aflicción; y habiendo rasgado mi vestido y mi manto, postréme de rodillas, y extendí mis palmas á Jehová mi Dios,
⁶Y dije: Dios mío, confuso y avergonzado estoy para levantar, oh Dios mío, mi rostro á ti: porque nuestras iniquidades se han multiplicado sobre nuestra cabeza, y nuestros delitos han crecido hasta el cielo. (Esd. 9:5‑6)

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Job 9:16• ¹⁶Que si yo le invocase, y él me respondiese, Aun no creeré que haya escuchado mi voz. (Job 9:16)

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Is. 6:5• ⁵Entonces dije: Ay de mí! que soy muerto; que siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos. (Is. 6:5)

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Dn. 9:7• ⁷Tuya es, Señor, la justicia, y nuestra la confusión de rostro, como en el día de hoy á todo hombre de Judá, y á los moradores de Jerusalem, y á todo Israel, á los de cerca y á los de lejos, en todas las tierras á donde los has echado á causa de su rebelión con que contra ti se rebelaron. (Dn. 9:7)

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Lc. 8:47‑48• ⁴⁷Entonces, como la mujer vió que no se había ocultado, vino temblando, y postrándose delante de él declaróle delante de todo el pueblo la causa por qué le había tocado, y cómo luego había sido sana.
⁴⁸Y él dijo: Hija, tu fe te ha salvado: ve en paz. (Lc. 8:47‑48)

clefts.

Éx. 33:22‑23• ²²Y será que, cuando pasare mi gloria, yo te pondré en una hendidura de la peña, y te cubriré con mi mano hasta que haya pasado:
²³Después apartaré mi mano, y verás mis espaldas; mas no se verá mi rostro. (Éx. 33:22‑23)

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Is. 2:21• ²¹Y se entrarán en las hendiduras de las rocas y en las cavernas de las peñas, por la presencia formidable de Jehová, y por el resplandor de su majestad, cuando se levantare para herir la tierra. (Is. 2:21)

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Jer. 49:16• ¹⁶Tu arrogancia te engañó, y la soberbia de tu corazón, tú que habitas en cavernas de peñas, que tienes la altura del monte: aunque alces como águila tu nido, de allí te haré descender, dice Jehová. (Jer. 49:16)

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Abd. 3• ³La soberbia de tu corazón te ha engañado, tú que moras en las hendiduras de las peñas, en tu altísima morada; que dices en tu corazón: ¿Quién me derribará á tierra? (Abd. 3)

let me hear.

Cnt. 8:13• ¹³Oh tú la que moras en los huertos, Los compañeros escuchan tu voz: Házmela oir. (Cnt. 8:13)

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Sal. 50:14‑15• ¹⁴Sacrifica á Dios alabanza, Y paga tus votos al Altísimo.
¹⁵E invócame en el día de la angustia: Te libraré, y tú me honrarás. (Sal. 50:14‑15)

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Pr. 15:8• ⁸El sacrificio de los impíos es abominación á Jehová: Mas la oración de los rectos es su gozo. (Pr. 15:8)

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He. 4:16• ¹⁶Lleguémonos pues confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar misericordia, y hallar gracia para el oportuno socorro. (He. 4:16)

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He. 10:22• ²²Lleguémonos con corazón verdadero, en plena certidumbre de fe, purificados los corazones de mala conciencia, y lavados los cuerpos con agua limpia. (He. 10:22)

for sweet.

Sal. 22:3• ³Tú empero eres santo, Tú que habitas entre las alabanzas de Israel. (Sal. 22:3)

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Sal. 50:23• ²³El que sacrifica alabanza me honrará: Y al que ordenare su camino, Le mostraré la salud de Dios. (Sal. 50:23)

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Is. 51:3• ³Ciertamente consolará Jehová á Sión: consolará todas sus soledades, y tornará su desierto como paraíso, y su soledad como huerto de Jehová; hallarse ha en ella alegría y gozo, alabanza y voz de cantar. (Is. 51:3)

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Ap. 4:8‑10• ⁸Y los cuatro animales tenían cada uno por sí seis alas alrededor, y de dentro estaban llenos de ojos; y no tenían reposo día ni noche, diciendo: Santo, santo, santo el Señor Dios Todopoderoso, que era, y que es, y que ha de venir.
⁹Y cuando aquellos animales daban gloria y honra y alabanza al que estaba sentado en el trono, al que vive para siempre jamás,
¹⁰Los veinticuatro ancianos se postraban delante del que estaba sentado en el trono, y adoraban al que vive para siempre jamás, y echaban sus coronas delante del trono, diciendo: (Ap. 4:8‑10)

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Ap. 5:8• ⁸Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro animales y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero, teniendo cada uno arpas, y copas de oro llenas de perfumes, que son las oraciones de los santos: (Ap. 5:8)

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Ap. 7:9‑10• ⁹Después de estas cosas miré, y he aquí una gran compañía, la cual ninguno podía contar, de todas gentes y linajes y pueblos y lenguas, que estaban delante del trono y en la presencia del Cordero, vestidos de ropas blancas, y palmas en sus manos;
¹⁰Y clamaban en alta voz, diciendo: Salvación á nuestro Dios que está sentado sobre el trono, y al Cordero. (Ap. 7:9‑10)

thy countenance.

Cnt. 1:5,8• ⁵Morena soy, oh hijas de Jerusalem, Mas codiciable; Como las cabañas de Cedar, Como las tiendas de Salomón.
⁸Si tú no lo sabes, oh hermosa entre las mujeres, Sal, yéndote por las huellas del rebaño, Y apacienta tus cabritas junto á las cabañas de los pastores. (Cnt. 1:5,8)

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Cnt. 6:10• ¹⁰¿Quién es ésta que se muestra como el alba, Hermosa como la luna, Esclarecida como el sol, Imponente como ejércitos en orden? (Cnt. 6:10)

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Sal. 45:11• ¹¹Y deseará el rey tu hermosura: E inclínate á él, porque él es tu Señor. (Sal. 45:11)

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Sal. 110:3• ³Tu pueblo serálo de buena voluntad en el día de tu poder, En la hermosura de la santidad: desde el seno de la aurora, Tienes tú el rocío de tu juventud. (Sal. 110:3)

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Ef. 5:27• ²⁷Para presentársela gloriosa para sí, una iglesia que no tuviese mancha ni arruga, ni cosa semejante; sino que fuese santa y sin mancha. (Ef. 5:27)

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Col. 1:22• ²²En el cuerpo de su carne por medio de muerte, para haceros santos, y sin mancha, é irreprensibles delante de él: (Col. 1:22)

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1 P. 3:4• ⁴Sino el hombre del corazón que está encubierto, en incorruptible ornato de espíritu agradable y pacífico, lo cual es de grande estima delante de Dios. (1 P. 3:4)

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Jud. 24• ²⁴A aquel, pues, que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros delante de su gloria irreprensibles, con grande alegría, (Jud. 24)

• The King has told the bride of a land of sunshine and song, when the winter will be past and the rain will be over and gone; but in the meantime, she is yet in the land of winter and storm. But the One who is coming for her is the One who protects her. (“Canticle 2: The Awakening of Love” by H. Smith)

J. N. Darby Translation

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14

My dove, in the clefts of the rock, In the covert of the precipice, Let me see thy countenance, let me hear thy voice; For sweet is thy voice, and thy countenance is comely.