UN VERSÍCULO PARA MEMORIZAR
"Entonces los que temían a Jehová hablaron cada uno a su compañero; y Jehová escuchó y
oyó, y fue escrito libro de memoria delante de él para los que temen a Jehová, y para los
que piensan en su nombre." Malaquías 3:16
Malaquías es el último de los profetas menores. No se sabe nada de su historia personal; se nombra una sola vez. Profetizaba durante el tiempo del regreso de Nehemías de la cautividad a la Palestina.
Esta profecía revela la condición moral del pueblo, que era nada edificante. Pero revela al mismo tiempo el amor soberano de Jehová hacia ellos. Les acusaba de sus iniquidades, pero respondían "¿En qué hemos menospreciado tu nombre?"
Ellos trajeron al Señor lo malo cuando presentaron sus ofrendas, y Él los reprendió duramente (véase todo el capítulo 1). No comprendían el gran amor que Dios tuvo hacia ellos.
Los sacerdotes debían haber guiado al pueblo, pero no atendieron bien sus deberes, así el profeta tuvo que amenazarles duramente (véase capítulo 21-9). Pero a pesar de la apatía de ellos en su ministerio, Dios en su misericordia les prometió que su tierra sería una tierra bendecida.
El capítulo 3 inicia con una promesa preciosa: "He aquí yo envío mi mensajero, el cual preparará el camino delante de mí; y vendrá súbitamente a su templo el Señor a quien vosotros buscáis... He aquí viene... Porque él es como fuego purificador, y como jabón de lavadores... Reprenderé también por vosotros al devorador, y no os destruirá el fruto de la tierra, ni vuestra vid en el campo será estéril, dice Jehová de los ejércitos. Y todas las naciones os dirán bienaventurados; porque seréis tierra deseable, dice Jehová de los ejércitos" (Véanse los vs. 1, 2, 11 y 12.).
Mientras tanto el profeta habla del "Remanente" como aquellos que temen al Señor y testifican cada uno con su compañero. Dice en el v. 16, que "Jehová escuchó y oyó, y fue escrito el libro de memoria delante de él para los que temen a Jehová, y para los que piensan en su nombre.”
El capítulo 4 habla del juicio que se acerca cuando los malos serán consumidos. Elías vendría como precursor para llamarlos al arrepentimiento antes que viniera el día de Jehová grande y terrible. Véase v. 5. Para aquellos que temen Su nombre, "nacerá el Sol de Justicia (Cristo) y en sus alas traerá salvación".
Malaquías 1:6
"El hijo honra al padre, y el siervo a su Señor. Si, pues, soy yo padre, ¿dónde está mi honra? y si soy señor, ¿dónde está mi temor? dice Jehová de los ejércitos a vosotros, oh sacerdotes, que menospreciáis mi nombre. Y decís: ¿En qué hemos menospreciado tu nombre?" Este versículo, ya mencionado arriba, es impactante. Una cosa es errar, pero es peor errar y no reconocerlo. Tan infieles habían sido a Jehová, y no podían reconocerlo. Es posible que tú hayas leído hasta el libro de Malaquías y todavía no reconozcas tu condición como pecador perdido en tus pecados o como creyente verdadero pero extrañado de tu Señor. Es tiempo de humillarte en la presencia de Dios y convertirte o reconciliarte con el Señor.
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