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Romans 12

Ro. 12:12 KJV (With Strong’s)

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12
Rejoicing
chairo (Greek #5463)
to be "cheer"ful, i.e. calmly happy or well-off; impersonally, especially as salutation (on meeting or parting), be well
KJV usage: farewell, be glad, God speed, greeting, hall, joy(- fully), rejoice.
Pronounce: khah'-ee-ro
Origin: a primary verb
y in hope
ho (Greek #3588)
the definite article; the (sometimes to be supplied, at others omitted, in English idiom)
KJV usage: the, this, that, one, he, she, it, etc.
Pronounce: ho
Origin: ἡ (hay), and the neuter τό (to) in all their inflections
elpis (Greek #1680)
expectation (abstractly or concretely) or confidence
KJV usage: faith, hope.
Pronounce: el-pece'
Origin: from a primary ἔλπω (to anticipate, usually with pleasure)
; patient
hupomeno (Greek #5278)
to stay under (behind), i.e. remain; figuratively, to undergo, i.e. bear (trials), have fortitude, persevere
KJV usage: abide, endure, (take) patient(-ly), suffer, tarry behind.
Pronounce: hoop-om-en'-o
Origin: from 5259 and 3306
z in tribulation
ho (Greek #3588)
the definite article; the (sometimes to be supplied, at others omitted, in English idiom)
KJV usage: the, this, that, one, he, she, it, etc.
Pronounce: ho
Origin: ἡ (hay), and the neuter τό (to) in all their inflections
thlipsis (Greek #2347)
pressure (literally or figuratively)
KJV usage: afflicted(-tion), anguish, burdened, persecution, tribulation, trouble.
Pronounce: thlip'-sis
Origin: from 2346
; continuingb instant
proskartereo (Greek #4342)
to be earnest towards, i.e. (to a thing) to persevere, be constantly diligent, or (in a place) to attend assiduously all the exercises, or (to a person) to adhere closely to (as a servitor)
KJV usage: attend (give self) continually (upon), continue (in, instant in, with), wait on (continually).
Pronounce: pros-kar-ter-eh'-o
Origin: from 4314 and 2594
in prayer
ho (Greek #3588)
the definite article; the (sometimes to be supplied, at others omitted, in English idiom)
KJV usage: the, this, that, one, he, she, it, etc.
Pronounce: ho
Origin: ἡ (hay), and the neuter τό (to) in all their inflections
proseuche (Greek #4335)
prayer (worship); by implication, an oratory (chapel)
KJV usage: X pray earnestly, prayer.
Pronounce: pros-yoo-khay'
Origin: from 4336
;

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Rejoicing.
Ro. 5:2‑3• 2Por el cual también tenemos entrada por la fe á esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios.
3Y no sólo esto, mas aun nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia;
(Ro. 5:2‑3)
;
Ro. 15:13• 13Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz creyendo, para que abundéis en esperanza por la virtud del Espíritu Santo. (Ro. 15:13)
;
Sal. 16:9‑11• 9Alegróse por tanto mi corazón, y se gozó mi gloria: También mi carne reposará segura.
10Porque no dejarás mi alma en el sepulcro; Ni permitirás que tu santo vea corrupción.
11Me mostrarás la senda de la vida: Hartura de alegrías hay con tu rostro; Deleites en tu diestra para siempre.
(Sal. 16:9‑11)
;
Sal. 71:20‑23• 20Tú, que me has hecho ver muchas angustias y males, Volverás á darme vida, Y de nuevo me levantarás de los abismos de la tierra.
21Aumentarás mi grandeza, Y volverás á consolarme.
22Asimismo yo te alabaré con instrumento de salterio, Oh Dios mío: tu verdad cantaré yo á ti en el arpa, Oh Santo de Israel.
23Mis labios cantarán cuando á ti salmeare, Y mi alma, á la cual redimiste.
(Sal. 71:20‑23)
;
Sal. 73:24‑26• 24Hasme guiado según tu consejo, Y después me recibirás en gloria.
25¿A quién tengo yo en los cielos? Y fuera de ti nada deseo en la tierra.
26Mi carne y mi corazón desfallecen: Mas la roca de mi corazón y mi porción es Dios para siempre.
(Sal. 73:24‑26)
;
Pr. 10:28• 28La esperanza de los justos es alegría; Mas la esperanza de los impíos perecerá. (Pr. 10:28)
;
Pr. 14:32• 32Por su maldad será lanzado el impío: Mas el justo en su muerte tiene esperanza. (Pr. 14:32)
;
Lm. 3:24‑26• 24Mi parte es Jehová, dijo mi alma; por tanto en él esperaré.
25Bueno es Jehová á los que en él esperan, al alma que le buscare.
26Bueno es esperar callando en la salud de Jehová.
(Lm. 3:24‑26)
;
Hab. 3:17‑18• 17Aunque la higuera no florecerá, Ni en las vides habrá frutos; Mentirá la obra de la oliva, Y los labrados no darán mantenimiento. Y las ovejas serán quitadas de la majada, Y no habrá vacas en los corrales;
18Con todo yo me alegraré en Jehová, Y me gozaré en el Dios de mi salud.
(Hab. 3:17‑18)
;
Mt. 5:12• 12Gozaos y alegraos; porque vuestra merced es grande en los cielos: que así persiguieron á los profetas que fueron antes de vosotros. (Mt. 5:12)
;
Lc. 10:20• 20Mas no os gocéis de esto, que los espíritus se os sujetan; antes gozaos de que vuestros nombres están escritos en los cielos. (Lc. 10:20)
;
1 Co. 13:13• 13Y ahora permanecen la fe, la esperanza, y la caridad, estas tres: empero la mayor de ellas es la caridad. (1 Co. 13:13)
;
Fil. 3:1• 1Resta, hermanos, que os gocéis en el Señor. A mí, á la verdad, no es molesto el escribiros las mismas cosas, y para vosotros es seguro. (Fil. 3:1)
;
Fil. 4:4• 4Gozaos en el Señor siempre: otra vez digo: Que os gocéis. (Fil. 4:4)
;
Col. 1:27• 27A los cuales quiso Dios hacer notorias las riquezas de la gloria de este misterio entre los Gentiles; que es Cristo en vosotros la esperanza de gloria: (Col. 1:27)
;
1 Ts. 5:8,16• 8Mas nosotros, que somos del día, estemos sobrios, vestidos de cota de fe y de caridad, y la esperanza de salud por yelmo.
16Estad siempre gozosos.
(1 Ts. 5:8,16)
;
2 Ts. 2:16‑17• 16Y el mismo Señor nuestro Jesucristo, y Dios y Padre nuestro, el cual nos amó, y nos dió consolación eterna, y buena esperanza por gracia,
17Consuele vuestros corazones, y os confirme en toda buena palabra y obra.
(2 Ts. 2:16‑17)
;
Tit. 2:13• 13Esperando aquella esperanza bienaventurada, y la manifestación gloriosa del gran Dios y Salvador nuestro Jesucristo. (Tit. 2:13)
;
Tit. 3:7• 7Para que, justificados por su gracia, seamos hechos herederos según la esperanza de la vida eterna. (Tit. 3:7)
;
He. 3:6• 6Mas Cristo como hijo, sobre su casa; la cual casa somos nosotros, si hasta el cabo retuviéremos firme la confianza y la gloria de la esperanza. (He. 3:6)
;
He. 6:17‑19• 17Por lo cual, queriendo Dios mostrar más abundantemente á los herederos de la promesa la inmutabilidad de su consejo, interpuso juramento;
18Para que por dos cosas inmutables, en las cuales es imposible que Dios mienta, tengamos un fortísimo consuelo, los que nos acogemos á trabarnos de la esperanza propuesta:
19La cual tenemos como segura y firme ancla del alma, y que entra hasta dentro del velo;
(He. 6:17‑19)
;
1 P. 1:3‑8• 3Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos ha regenerado en esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,
4Para una herencia incorruptible, y que no puede contaminarse, ni marchitarse, reservada en los cielos
5Para nosotros que somos guardados en la virtud de Dios por fe, para alcanzar la salud que está aparejada para ser manifestada en el postrimero tiempo.
6En lo cual vosotros os alegráis, estando al presente un poco de tiempo afligidos en diversas tentaciones, si es necesario,
7Para que la prueba de vuestra fe, mucho más preciosa que el oro, el cual perece, bien que sea probado con fuego, sea hallada en alabanza, gloria y honra, cuando Jesucristo fuera manifestado:
8Al cual, no habiendo visto, le amáis; en el cual creyendo, aunque al presente no lo veáis, os alegráis con gozo inefable y glorificado;
(1 P. 1:3‑8)
;
1 P. 4:13• 13Antes bien gozaos en que sois participantes de las aflicciones de Cristo; para que también en la revelación de su gloria os gocéis en triunfo. (1 P. 4:13)
;
1 Jn. 3:1‑3• 1Mirad cuál amor nos ha dado el Padre, que seamos llamados hijos de Dios: por esto el mundo no nos conoce, porque no le conoce á él.
2Muy amados, ahora somos hijos de Dios, y aun no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él apareciere, seremos semejantes á él, porque le veremos como él es.
3Y cualquiera que tiene esta esperanza en él, se purifica, como él también es limpio.
(1 Jn. 3:1‑3)
patient.
Ro. 2:7• 7A los que perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad, la vida eterna. (Ro. 2:7)
;
Ro. 5:3‑4• 3Y no sólo esto, mas aun nos gloriamos en las tribulaciones, sabiendo que la tribulación produce paciencia;
4Y la paciencia, prueba; y la prueba, esperanza;
(Ro. 5:3‑4)
;
Ro. 8:25• 25Empero si lo que no vemos esperamos, por paciencia esperamos. (Ro. 8:25)
;
Ro. 15:4• 4Porque las cosas que antes fueron escritas, para nuestra enseñanza fueron escritas; para que por la paciencia, y por la consolación de las Escrituras, tengamos esperanza. (Ro. 15:4)
;
Sal. 37:7• 7Calla á Jehová, y espera en él: No te alteres con motivo del que prospera en su camino, Por el hombre que hace maldades. (Sal. 37:7)
;
Sal. 40:1• 1Al Músico principal: Salmo de David. Resignadamente esperé á Jehová, E inclinóse á mí, y oyó mi clamor. (Sal. 40:1)
;
Lc. 8:15• 15Mas la que en buena tierra, éstos son los que con corazón bueno y recto retienen la palabra oída, y llevan fruto en paciencia. (Lc. 8:15)
;
Lc. 21:19• 19En vuestra paciencia poseeréis vuestras almas. (Lc. 21:19)
;
Col. 1:11• 11Corroborados de toda fortaleza, conforme á la potencia de su gloria, para toda tolerancia y largura de ánimo con gozo; (Col. 1:11)
;
1 Ts. 1:3• 3Sin cesar acordándonos delante del Dios y Padre nuestro de la obra de vuestra fe, y del trabajo de amor, y de la tolerancia de la esperanza del Señor nuestro Jesucristo: (1 Ts. 1:3)
;
2 Ts. 1:4• 4Tanto, que nosotros mismos nos gloriamos de vosotros en las iglesias de Dios, de vuestra paciencia y en todas vuestras persecuciones y tribulaciones que sufrís: (2 Ts. 1:4)
;
2 Ts. 3:5• 5Y el Señor enderece vuestros corazones en el amor de Dios, y en la paciencia de Cristo. (2 Ts. 3:5)
;
1 Ti. 6:11• 11Mas tú, oh hombre de Dios, huye de estas cosas, y sigue la justicia, la piedad, la fe, la caridad, la paciencia, la mansedumbre. (1 Ti. 6:11)
;
2 Ti. 3:10• 10Pero tú has comprendido mi doctrina, instrucción, intento, fe, largura de ánimo, caridad, paciencia, (2 Ti. 3:10)
;
He. 6:12,15• 12Que no os hagáis perezosos, mas imitadores de aquellos que por la fe y la paciencia heredan las promesas.
15Y así, esperando con largura de ánimo, alcanzó la promesa.
(He. 6:12,15)
;
He. 10:36• 36Porque la paciencia os es necesaria; para que, habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. (He. 10:36)
;
He. 12:1• 1Por tanto nosotros también, teniendo en derredor nuestro una tan grande nube de testigos, dejando todo el peso del pecado que nos rodea, corramos con paciencia la carrera que nos es propuesta, (He. 12:1)
;
Stg. 1:3‑4• 3Sabiendo que la prueba de vuestra fe obra paciencia.
4Mas tenga la paciencia perfecta su obra, para que seáis perfectos y cabales, sin faltar en alguna cosa.
(Stg. 1:3‑4)
;
Stg. 5:7,10‑11• 7Pues, hermanos, tened paciencia hasta la venida del Señor. Mirad cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando con paciencia, hasta que reciba la lluvia temprana y tardía.
10Hermanos míos, tomad por ejemplo de aflicción y de paciencia, á los profetas que hablaron en nombre del Señor.
11He aquí, tenemos por bienaventurados á los que sufren. Habéis oído la paciencia de Job, y habéis visto el fin del Señor, que el Señor es muy misericordioso y piadoso.
(Stg. 5:7,10‑11)
;
1 P. 2:19‑20• 19Porque esto es agradable, si alguno á causa de la conciencia delante de Dios, sufre molestias padeciendo injustamente.
20Porque ¿qué gloria es, si pecando vosotros sois abofeteados, y lo sufrís? mas si haciendo bien sois afligidos, y lo sufrís, esto ciertamente es agradable delante de Dios.
(1 P. 2:19‑20)
;
2 P. 1:6• 6Y en la ciencia templanza, y en la templanza paciencia, y en la paciencia temor de Dios; (2 P. 1:6)
;
Ap. 13:10• 10El que lleva en cautividad, va en cautividad: el que á cuchillo matare, es necesario que á cuchillo sea muerto. Aquí está la paciencia y la fe de los santos. (Ap. 13:10)
continuing.
Gn. 32:24‑26• 24Y quedóse Jacob solo, y luchó con él un varón hasta que rayaba el alba.
25Y como vió que no podía con él, tocó en el sitio del encaje de su muslo, y descoyuntóse el muslo de Jacob mientras con él luchaba.
26Y dijo: Déjame, que raya el alba. Y él dijo: No te dejaré, si no me bendices.
(Gn. 32:24‑26)
;
Job 27:8‑10• 8Porque ¿cuál es la esperanza del hipócrita, por mucho que hubiere robado, Cuando Dios arrebatare su alma?
9¿Oirá Dios su clamor Cuando la tribulación sobre él viniere?
10¿Deleitaráse en el Omnipotente? ¿Invocará á Dios en todo tiempo?
(Job 27:8‑10)
;
Sal. 55:16‑17• 16Yo á Dios clamaré; Y Jehová me salvará.
17Tarde y mañana y á medio día oraré y clamaré; Y él oirá mi voz.
(Sal. 55:16‑17)
;
Sal. 62:8• 8Esperad en él en todo tiempo, oh pueblos; Derramad delante de él vuestro corazón: Dios es nuestro amparo. (Selah.) (Sal. 62:8)
;
Sal. 109:4• 4En pago de mi amor me han sido adversarios: Mas yo oraba. (Sal. 109:4)
;
Jer. 29:12‑13• 12Entonces me invocaréis, é iréis y oraréis á mí, y yo os oiré:
13Y me buscaréis y hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón.
(Jer. 29:12‑13)
;
Dn. 9:18‑19• 18Inclina, oh Dios mío, tu oído, y oye; abre tus ojos, y mira nuestros asolamientos, y la ciudad sobre la cual es llamado tu nombre: porque no derramamos nuestros ruegos ante tu acatamiento confiados en nuestras justicias, sino en tus muchas miseraciones.
19Oye, Señor; oh Señor, perdona; presta oído, Señor, y haz; no pongas dilación, por amor de ti mismo, Dios mío: porque tu nombre es llamado sobre tu ciudad y sobre tu pueblo.
(Dn. 9:18‑19)
;
Lc. 11:5‑13• 5Díjoles también: ¿Quién de vosotros tendrá un amigo, é irá á él á media noche, y le dirá: Amigo, préstame tres panes,
6Porque un amigo mío ha venido á mí de camino, y no tengo que ponerle delante;
7Y el de dentro respondiendo, dijere: No me seas molesto; la puerta está ya cerrada, y mis niños están conmigo en cama; no puedo levantarme, y darte?
8Os digo, que aunque no se levante á darle por ser su amigo, cierto por su importunidad se levantará, y le dará todo lo que habrá menester.
9Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y os será abierto.
10Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se abre.
11¿Y cuál padre de vosotros, si su hijo le pidiere pan, le dará una piedra?, ó, si pescado, ¿en lugar de pescado, le dará una serpiente?
12O, si le pidiere un huevo, ¿le dará un escorpión?
13Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas á vuestros hijos, ¿ cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo á los que lo pidieren de él?
(Lc. 11:5‑13)
;
Lc. 18:1‑8,9‑43• 1Y propúsoles también una parábola sobre que es necesario orar siempre, y no desmayar,
2Diciendo: Había un juez en una ciudad, el cual ni temía á Dios, ni respetaba á hombre.
3Había también en aquella ciudad una viuda, la cual venía á él diciendo: Hazme justicia de mi adversario.
4Pero él no quiso por algún tiempo; mas después de esto dijo dentro de sí: Aunque ni temo á Dios, ni tengo respeto á hombre,
5Todavía, porque esta viuda me es molesta, le haré justicia, porque al fin no venga y me muela.
6Y dijo el Señor: Oid lo que dice el juez injusto.
7¿Y Dios no hará justicia á sus escogidos, que claman á él día y noche, aunque sea longánime acerca de ellos?
8Os digo que los defenderá presto. Empero cuando el Hijo del hombre viniere, ¿ hallará fe en la tierra?
9Y dijo también á unos que confiaban de sí como justos, y menospreciaban á los otros, esta parábola:
10Dos hombres subieron al templo á orar: el uno Fariseo, el otro publicano.
11El Fariseo, en pie, oraba consigo de esta manera: Dios, te doy gracias, que no soy como los otros hombres, ladrones, injustos, adúlteros, ni aun como este publicano;
12Ayuno dos veces á la semana, doy diezmos de todo lo que poseo.
13Mas el publicano estando lejos no quería ni aun alzar los ojos al cielo, sino que hería su pecho, diciendo: Dios, sé propició á mí pecador.
14Os digo que éste descendió á su casa justificado antes que el otro; porque cualquiera que se ensalza, será humillado; y el que se humilla, será ensalzado.
15Y traían á él los niños para que los tocase; lo cual viendo los discípulos les reñían.
16Mas Jesús llamándolos, dijo: Dejad los niños venir á mí, y no los impidáis; porque de tales es el reino de Dios.
17De cierto os digo, que cualquiera que no recibiere el reino de Dios como un niño, no entrará en él.
18Y preguntóle un príncipe, diciendo: Maestro bueno, ¿qué haré para poseer la vida eterna?
19Y Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? ninguno hay bueno sino sólo Dios.
20Los mandamientos sabes: No matarás: No adulterarás: No hurtarás: No dirás falso testimonio: Honra á tu padre y á tu madre.
21Y él dijo: Todas estas cosas he guardado desde mi juventud.
22Y Jesús, oído esto, le dijo: Aun te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y da á los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme.
23Entonces él, oídas estas cosas, se puso muy triste, porque era muy rico.
24Y viendo Jesús que se había entristecido mucho, dijo: Cuán dificultosamente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas!
25Porque más fácil cosa es entrar un camello por el ojo de una aguja, que un rico entrar en el reino de Dios.
26Y los que lo oían, dijeron: ¿Y quién podrá ser salvo?
27Y él les dijo: Lo que es imposible para con los hombres, posible es para Dios.
28Entonces Pedro dijo: He aquí, nosotros hemos dejado las posesiones nuestras, y te hemos seguido.
29Y él les dijo: De cierto os digo, que nadie hay que haya dejado casa, padres, ó hermanos, ó mujer, ó hijos, por el reino de Dios,
30Que no haya de recibir mucho más en este tiempo, y en el siglo venidero la vida eterna.
31Y Jesús, tomando á los doce, les dijo: He aquí subimos á Jerusalem, y serán cumplidas todas las cosas que fueron escritas por los profetas, del Hijo del hombre.
32Porque será entregado á las gentes, y será escarnecido, é injuriado, y escupido.
33Y después que le hubieren azotado, le matarán: mas al tercer día resucitará.
34Pero ellos nada de estas cosas entendían, y esta palabra les era encubierta, y no entendían lo que se decía.
35Y aconteció que acercándose él á Jericó, un ciego estaba sentado junto al camino mendigando;
36El cual como oyó la gente que pasaba, preguntó qué era aquello.
37Y dijéronle que pasaba Jesús Nazareno.
38Entonces dió voces, diciendo: Jesús, Hijo de David, ten misericordia de mí.
39Y los que iban delante, le reñían que callase; mas él clamaba mucho más: Hijo de David, ten misericordia de mí.
40Jesús entonces parándose, mandó traerle á sí: y como él llegó, le preguntó,
41Diciendo: ¿Qué quieres que te haga? Y él dijo: Señor, que vea.
42Y Jesús le dijo: Ve, tu fe te ha hecho salvo.
43Y luego vió, y le seguía, glorificando á Dios: y todo el pueblo como lo vió, dió á Dios alabanza.
(Lc. 18:1‑8,9‑43)
;
Hch. 1:14• 14Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos. (Hch. 1:14)
;
Hch. 2:42• 42Y perseveraban en la doctrina de los apóstoles, y en la comunión, y en el partimiento del pan, y en las oraciones. (Hch. 2:42)
;
Hch. 6:4• 4Y nosotros persistiremos en la oración, y en el ministerio de la palabra. (Hch. 6:4)
;
Hch. 12:5• 5Así que, Pedro era guardado en la cárcel; y la iglesia hacía sin cesar oración á Dios por él. (Hch. 12:5)
;
2 Co. 12:8• 8Por lo cual tres veces he rogado al Señor, que se quite de mí. (2 Co. 12:8)
;
Ef. 6:18‑19• 18Orando en todo tiempo con toda deprecación y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda instancia y suplicación por todos los santos,
19Y por mí, para que me sea dada palabra en el abrir de mi boca con confianza, para hacer notorio el misterio del evangelio,
(Ef. 6:18‑19)
;
Fil. 4:6‑7• 6Por nada estéis afanosos; sino sean notorias vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con hacimiento de gracias.
7Y la paz de Dios, que sobrepuja todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros entendimientos en Cristo Jesús.
(Fil. 4:6‑7)
;
Col. 4:2,12• 2Perseverad en oración, velando en ella con hacimiento de gracias:
12Os saluda Epafras, el cual es de vosotros, siervo de Cristo, siempre solícito por vosotros en oraciones, para que estéis firmes, perfectos y cumplidos en todo lo que Dios quiere.
(Col. 4:2,12)
;
1 Ts. 5:17• 17Orad sin cesar. (1 Ts. 5:17)
;
He. 5:7• 7El cual en los días de su carne, ofreciendo ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas al que le podía librar de la muerte, fué oído por su reverencial miedo. (He. 5:7)
;
Stg. 5:15‑16• 15Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si estuviere en pecados, le serán perdonados.
16Confesaos vuestras faltas unos á otros, y rogad los unos por los otros, para que seáis sanos; la oración del justo, obrando eficazmente, puede mucho.
(Stg. 5:15‑16)
;
1 P. 4:7• 7Mas el fin de todas las cosas se acerca: sed pues templados, y velad en oración. (1 P. 4:7)
;
1 Jn. 5:14‑15• 14Y esta es la confianza que tenemos en él, que si demandáremos alguna cosa conforme á su voluntad, él nos oye.
15Y si sabemos que él nos oye en cualquiera cosa que demandáremos, sabemos que tenemos las peticiones que le hubiéremos demandado.
(1 Jn. 5:14‑15)
 Our hope (a deferred certainty) of the coming glory ought to be before us constantly. (Practical Righteousness Toward Fellow-Believers: Romans 12:9-16 by B. Anstey)
 Since the tendency is to give up in prayer, Paul's exhortation is to continue steadfastly in this priestly function. (Practical Righteousness Toward Fellow-Believers: Romans 12:9-16 by B. Anstey)

J. N. Darby Translation

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12
As regards hope, rejoicing: as regards tribulation, enduring: as regards prayer, persevering:

W. Kelly Translation

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12
in hope rejoicing; in tribulation enduring, in prayer persevering;